De caza... (Libre)

Negué con la cabeza y más cerca de su cuerpo volví a susurrar -No si te comportas.. y lo haces bien..- con comportarse me refería lógicamente a matar a mis clientes, solo me faltaba entrar a alguien que se dedicara a eso, entonces ya sería el fin del bar, aunque estaba seguro de que el no haría nada malo, espere a que me lo dijera por sí mismo si no tendría que comprobarlo de alguna manera.

Entorne los ojos y saque los colmillos, sonrei y se los enseñe.- Soy un vampiro... -espere su reaccion, pues estaba mas cerca de lo que me hubiese gustado que estuviera, sentia la sangre fluir por sus venas de manera constante, ni siquiera se le acelero el ritmo cardiaco al confesarle que no era humano.

Asentí y susurre de manera suave -Tienes hambre..?- la verdad es que podría haberme asustado, pero no me daba miedo era el primer vampiro que veía tan “inofensivo” alomejor también habían buenos.. seguí observándole, alomejor me estaba engañando para poder atacarme pero lo cierto es que me era bastante igual.

No... -dije sonriendo, no sabia porque no la mordia, ultimamente me estaba volviendo demasiado compasivo, pense, me hice una nota mental: "Matar por placer", ya casi habia olvidado lo bien que sentaba eso.- No estas asustada... ¿Conoces a mas vampiros? -pregunte riendome con los colmillos extendidos todavia.

Negué con mi cabeza afirmándole que no estaba asustada, aún seguía con los colmillos extendidos, cuando me preguntó si conocía a mas vampiros le mire y susurre -He visto a algunos.. y tú eres el más guapo sin duda..- fue un susurro suave, con una brizna inocente, lógicamente totalmente fingida, lleve mi mano a sus labios los acaricie tocando con mi dedo índice uno de sus afilados dientes, para ver su reacción.

Estaba seguro de que no habia querido molestarme, al contrario, intentaba halagarme, lo conseguia, y consegui mirarla con otros ojos tras sentir su mano en mis labios pero mis colmillos eran lo mas valioso para mi, me movi hacia atras rapidamente.- No soy una mascota... -dije solamente, y recogi los colmillos, quiza eso habia echado por la borda lo poco que teniamos ganado, espere su reaccion entornando los ojos.

-Lo sé.. solo quería notarlos..- admití mirando mi dedo en el asomaba una pequeña gota de sangre, ya que se había apartado de manera brusca y me había pinchado sin darse cuenta, escondió sus colmillos, no limpie la gota pero susurre -Si quieres.. me voy..- lo hice de forma suave.. y a la vez provocadora, no creía para nada que fuera como una mascota, pero ahora estaba receloso como un animal salvaje.

Empece a sentir el olor de la sangre inundar todos mis sentidos y cada parte de mi ser, mis colmillos se desplegaron de nuevo sin ser apenas consciente.- Te sangra el... -trague saliva.- Dedo. -me relami los labios, no era capaz de pensar en otra cosa, el olor de su sangre habia despertado mi apetito, ese que habia conseguido apartar hasta casi hacerlo desaparecer. Ni siquiera pude digerir sus palabras cuando me propuso irse.

Le vi estaba extraño y no caí en el dedo me acerque a él preocupada -Estas bien Mark?- pregunte cogiendo su rostro con mis manos, note como le volvían a salir los colmillos me quede quieta, pues no me había dicho nada más, cuando caí en mi dedo encima lo había puesto justo al lado de la boca, pensé que sería mejor, si retirarme o que hacer..

Di un par de pasos atras, no queria hacerle daño.- Hambre... -dije, comence a respirar aire fresco y a despejar mi mente, no podia perder asi las maneras, en todos los sitios habia posibilidad de que alguien se cortase, o se cayese o cualquier cosa que podia provocar una herida.- Lo siento... -dije a regañadientes, no era alguien que pedia perdon a menudo, esperaba no tener que repetirlo en mucho tiempo, lo sentia tanto por mi reaccion como por haberme retirado rapido y haberla herido.

Finalmente se retiro me lamí el dedo asegurándome de que no saliera más sangre después observe a Mark con cautela, le había despertado el apetito por mi culpa, y no quería que se fuera por eso, me apreté la herida contra el vestido ya no sangraba, pronto se cerraría en un rato y no habría problema -No te disculpes no es tu culpa…- murmure de manera suave algo entristecida por la situación.

Eso si que me extrañaba, otro humano hubiese salido corriendo ante la reaccion, o se hubiese enfadado, pero no se hubiese entristecido, frunci el ceño.- Eres especial... -dije, y lo dije como uno de los mayores piropos que podian salir de mi boca.- ¿Porque te has puesto asi? No tiene nada que ver contigo, solo que... Ultimamente mi autocontrol flojea, debe ser este pueblo... -dije meditando sobre lo que acababa de decir.

Escuche lo que decía pero no le di importancia pensé que se refería más bien a rara que no un piropo y cuando dijo que este pueblo.. y que su autocontrol flojeaba le mire -Nunca te pasa eso?- pregunte casi en un susurro -Aquí te ha pasado más? Alomejor es mi culpa- susurre de igual manera, o alomejor ellos no tenían ninguna distinción con la sangre que tomaban.

Negue, no me pasaba a menudo.- Llevo 400 años con esto, mi autocontrol mueve montañas. -sonrei.- O movia... Pero desde que estoy aqui no se que me pasa, no soy capaz de pensar en otra cosa que no sea sangre. -dije crispado, despues negue con la cabeza y me rei.- Es una tonteria, lo siento. -le acaricie la mejilla suavemente sintiendo la sangre fluir por sus venas, me mordi el labio inferior.- Tu sangre me provoca... -dije, por fin.

Le escuche con atención sin decir nada, por no incomodarle, y así me enteraba de lo que le pasaba, ladee mi cabeza con una sonrisa, mientras hablaba note como acariciaba mi mejilla y cerré los ojos después cuando dijo aquello los abrí sin saber que decirle su mano fría, me reconfortaba, -La mía en especial?- pregunte sin saber si se refería a eso o solo fue un comentario sin importancia.

Sus mejillas se sonrosaron un poco, quien sabe si por la pregunta que acababa de hacerme.- Debes estar deliciosa, jefa... -dije como respuesta, sonrei y le guiñe un ojo, me aproxime a ella, sentia el calor que emanaba su cuerpo, sus latidos se aceleraron ligeramente. No hice ningun movimiento mas, pero estaba tan proximo a ella que podria haber contado incluso sus pestañas, incline la cabeza ligeramente y sonrei de nuevo, me mordi el labio inferior.

Cuando comentó aquello, pude notar yo misma como mis pulsaciones se aceleraban, no porque le tuviera miedo sino al contrario, se acerco muchísimo más podía notar la energía y el frescor que desprendía su cuerpo, alce ligeramente la cabeza algo cohibida, no solía cohibirme con los hombres pero siempre hay alguna excepción supongo, me encontré con sus labios los observé mientras él se mordía el labio inferior, quise llevar mi mano a ellos para acariciarlos pero me abstuve de hacerlo, no sabía si le sentaría mal, después susurre -Ese comentario.. puede tener dos sentidos..- dije tan solo con una pequeña sonrisa.

Cuando alzo la cabeza pude sentir su respiración sobre mi piel, sonreí, parecía algo cohibida, otra sorpresa, no me había parecido una de esas personas que se cohibía con los hombres. Continue mirándola y alce las cejas, no dejaba de mirar mis labios, normalmente, hubiera sido yo quien hubiese dado el primer paso, pero esta ocasión era especial, ella no era como las demás, asi que permaneci estatico y me rei ligeramente cuando escuche sus palabras.- Puede tener todos los sentidos que quieras que tenga... Te los ofrezco todos. –sonrei encantador.

Sonreí y susurre de manera juguetona pasando mi respiración por sus labios y por su rostro mientras hablaba -En este caso.. debería ofrecértelo yo.. no crees..?- una vez lo hice, alce mi mano y pase mi dedo índice por su cuello muy delicadamente recorriéndolo de manera sensual, para después pasarlo por sus labios, delineándolos, y finalmente llevarlo a mi boca y chuparlo con una sonrisita juguetona, en realidad, si hubiera visto la escena des de fuera hubiera pensado que la mujer era una ligera, pero mis movimientos eran delicados, cosa que borraba la opción de que fuera una mujer ligera, almenos bajo mi punto de vista, ya que no lo era.

-¿Y me lo estas ofreciendo? –pregunte con una sonrisa juguetona, eso estaría bastante bien, pensé. Recorrió mi cuello con su dedo, cerré los ojos, estaba cálida, como todos los humanos, eso hacia agradable que me tocara. Como estaba con los ojos cerrados me sorprendió notar su dedo en mi boca, pero no me desagrado en absoluto, abrí los ojos de golpe y sonreí al ver como se lo llevaba a la boca, lo hacía todo ligeramente, en otras ocasiones, las humanas son bruscas, eso no me gustaba, prefería hacer las cosas despacio, siempre resulta mas divertido.

Vi como cerraba los ojos, y como volvía abrirlos justo cuando yo acariciaba sus labios y llevaba el dedo a mi boca para lamerlo de forma sensual, note su sonrisa y finalmente susurre aún con el dedo ligeramente en mi boca entreabierta, -Puede que sí..- susurre esbozando una sonrisa de nuevo juguetona esta vez algo más picara, me llamaba la atención en especial Puck, espere a ver que hacía o que decía.

Sonrei y me mordí el labio, quería besarla, pero me lo había negado… Por una vez, quería que ella llevase las riendas.- Eso suena bien… -dije, genial, ahora también estaba ansioso, no sabia si ella sabia que yo me refería a su sangre, no parecía alguien a quien le gusta que le muerdan, daba igual, no solamente era su sangre lo que me atraía de ella… Aunque tenia que reconocer que su olor me hacia enloquecer. Frunci el ceño esperando su reacción.

Sonreí de manera juguetona y asentí con la cabeza, después acerque mis labios a los suyos, dejando reposar mi aliento en ellos, para después amarrar entre mis labios, su labio inferior, mordiéndolo con suavidad y tirando de él para después, volver a ambos y besarle de manera dulce y delicada, una vez hice aquello me acerque a su oído y susurre -Dime.. que necesitas..- lo hice de manera juguetona, pero quería asegurarme de si tenía hambre o no, en realidad me estaba planteando dejar que me mordiera si lo necesitaba.

Me beso, delicadamente, eso fue raro, hacia mucho que nadie me besaba asi, ni siquiera supe si me gusto, estaba acostumbrado a cosas mas bruscas, sonrei.- Sangre... -dije cuando me pregunto, llegados a este punto, mejor ser sincero. Apoye las manos en su cintura y la atraje hacia mi, la bese, los movimientos delicados no se me hacian precisamente sencillos, asi que la bese con lujuria, primero recorri sus labios con mi lengua para despues introducirla en su boca y comenzar a jugar con la suya.

Asentí, cuando me tomo de la cintura, me beso con lujuria, yo le respondí de igual manera, jugando con su lengua, muy dispuesta a jugar con la mía y a mí no me importaba en absoluto, acaricie su rostro y susurre -Puedes morderme si quieres..- fue un susurro dulce y suave entre sus labios, no sabía si se podría controlar pero me era igual, confiaba en él ni siquiera sabía porque, volví a besarle esta vez mi beso fue más apasionado, y poco después me separe dejando mi frente apoyada en la suya, sonriendo dulcemente, tenía algo que me encantaba, y si me hubiera dejado llevar probablemente le hubiera pedido que me mordiera, e incluso, le hubiera pedido algo peor..