Buscando a mi hermano (Dean)

Invocarle ¿Sammy estas hablando en serio? Quires invocar un demonio, claro ya puestos porque no te lo cargas con ese poder tuyo, tal vez así no lo quitamos de encima. No es buena idea hermano no es la mejor opción créeme no sabemos, una mierda de ese demonio y si es mas fuerte de lo que pensamos hacemos ¿Qué? Un acto kamikaze no –muevo la cabeza – no creo que sea lo mejor Sammy. Sammy parece que insiste en comer, que demonios no tengo hambre well un poco nah más.

-Okay iremos al Burger King así no sale corriendo por ver a Ronald McDonald hahaha- Río bien fuerte, que carajo esto es bueno ver la cara de mi hermano horrorizado por ese payaso – seguro que te gusta Sammy quizás te haces amigo de el –le pongo la mano en el hombro, asiento lo que dice de salvar a Jake y Nicole, pero pienso que invocarlo es lo peor que podríamos hacer.- Okay bro lo que digas Jake sabe defender su trasero, entonces nada buscaremos ese demonio no lo cargamos y punto. – Me apoyo en la cama me siento en el filo –Nah Sammy no te preocupes soy de hierro, anda ven porque no pones la cabeza bajo mi hombro, hahaha Sammy eres idiota estoy bien en serio, si voy a comer algo eso es verdad luego nos cargaremos lo que encontremos por el camino We got work to do!

Negué con la cabeza.

-Era una idea, Dean -murmuré.- Tampoco es algo que no hayamos hecho antes, ¿no? Al fin y al cabo al invocarle se le encierra en un sello y no somos tontos, hermano. Podemos tomar precauciones de varios tipos... -sacudí la cabeza.- De todas formas, tampoco sabemos de qué otra forma localizarle.

Suspiré y puse los ojos en blanco cuando de nuevo se burló de mí por mi miedo a los payasos. Era algo extraño cuando menos, teniendo en cuenta que cada día me enfrentaba con seres de toda clase y mucho más aterradores que un payaso, y siempre sin sobresaltarme lo más mínimo. Pero es que los payasos son tan siniestras tan....no sé, no son algo bueno.

-Sí, después de ir a coger un avión, Dean -le devolví la pulla.

Sacudí la cabeza, exasperado.

-Ni de broma meto la cabeza ahí. ¿Se puede saber cuándo fue la última vez que te duchaste? Tío, existe algo llamado jabón...

Bla tus blas me aburro bro, sabes que voy a tomar una ducha, si creo que se donde esta el jabón. Ahora mismo voy a frotar mi cuerpo con el con sus agradables esencias oh! acabo de parecer gay, nah nunca seré gay porque amo las mujeres hermosas. Una cosa Sammy en serio dude ¿desde cuando no has tenido sexo? O come on en serio, Sammy debes tener sexo no ver tanto porno por cable, se que hablo en serio. Porque el mundo se va por el retrete y no es malo tener entretenimiento. Sabes que vamos a ir un club que conozco veras que hermosas mujeres, si dices que no te pateo el trasero hey! -me quedo pensativo- tal vez este ese demonio Lestat lo mismo le gusta ese tipo de club ¿te parece? te repito te daré una patada en el tu trasero, así que me ducho, comemos y vamos ese club. -Me voy al baño desde el baño -Damn hay sauna Sammy esto es great!

Puse los ojos en blanco mientras le oía parlotear.

-Sí, vete que te hace mucha falta -espeté, yendo a la nevera a por otra cerveza.

No sabía por qué pero me daba la impresión de que a lo largo de la tarde la iba a necesitar, y mucho.

-Eso es cosa mía -protesté.- Ya además, ¡yo no veo porno por cable! Lo ves tú -repliqué.

Le escuché irse al baño y reí por lo bajo.

-Dean, tú harías lo que fuera por ir a ese club, con Lestat o sin él.

salgo de la sauna -man te aseguro debes probar esta sauna -que decías de una Lestat ¿esta buena'?¿ saben sus pezones a cerveza?-me río fuerte -sammy sammy que cosas tienes man, vamos a ver -me visto- el porno no es malo bro, en serio es guay mejor es practicarlo oye en serio ¿desde cuando no tienes sexo con una mujer? debes follar más hermanito si no vas a desgastarte, o eso debes hacerte unas pajas tremendas, man de verdad ten sexo una mujer te lo suplico-termino de vestir -¿a donde vamos?-sonrío-

Vi a Dean salir de la sauna envuelto en una toalla. Bueno, al menos esta vez se ha tapado algo, pensé.

-Ya lo haré, Dean -repuse, sonriendo sin poder evitarlo.

A veces era tan fácil hacer feliz a mi hermano...

Sacudí la cabeza, exasperado.

-¿Siempre piensas en lo mismo, hermano? -pregunté.- Tío, pensar tanto en sexo no puede ser bueno, te lo digo en serio. Y no digo que el porno sea malo, lo que digo es que todo tiene sus límites o acaba pasando factura... y si no mírate a ti, preguntándome a qué le saben los pezones a un demonio -negué con la cabeza, divertido.

Me di la vuelta para quedar de espaldas a él. Maldita sea su fijación con mi vida sexual...

-A comer algo -dije, con firmeza.

Lo cierto es que yo mismo comenzaba a tener hambre.

Yeah Sammy dame un momento me visto –me dirijo hasta la habitación me visto pensando en como vamos a conseguir cárganos a ese demonio. (o más bien como hacerlo sin que mi hermano use ese poder) escapo un suspiro terminando de vestirme me acerco a mi hermano.

–Listo por cierto en serio dude, deberías probar la sauna es de lo mejor-
No se que decirle a mi hermano parecía ausente igual yo era bastante malo para expresar lo que siento siempre lo fui, pero me preocupo por mi hermano maldita sea es lo único que me queda para seguir en pie. Pero esta vez no me importa ser el hermano que diga todo lo que piense-Oye Sammy sobre el sexo tienes razón, sinceramente me gustaría que algún día encontraras alguien, tan especial como fue Jess

–me quedo callado no era el momento de mierdas de estas pero (porque no puedo ser sincero) –esto es tan loco bro, ángeles demonios, recuerdo antes que solo era buscar a papa seguir sus coordenadas ahora míranos, en esta especie de encrucijada. Soy consciente de que eso no será igual de que..-me quedo callado no quise seguir o era más que no puedo engañar a Sammy-Oye Sammy…si encontramos a ese demonio prométeme algo-me quedo serio-promete que no usaras ese poder

Asentí con una sonrisa de medio lado.

-Pero date prisa -pedí.

Me acerqué a la ventana de la habitación y me quedé mirando a través de ella. Eran tantas las cosas en las que pensar y tan poco el tiempo que había para hacerlo... Para empezar, estaba el asunto de Jessica, de su regreso. No sabía cómo sacar el tema, como contárselo a mi hermano y, por encima de todo, como hacerlo sin que le diese un ataque o algo semejante. Aquellas cosas solo le pasaban a nuestra familia. A nadie más.

-Ya lo haré Dean. No creo que sea el mejor momento para darme una ducha, ahora que estamos a punto de salir -respondí.

Como si hubiese estado escuchando mis pensamientos, él sólo sacó el tema de Jess. Me quedé inmóvil, sin saber qué hacer o decir. No podía desperdiciar la oportunidad, podría no volver a repetirse.

-Esto... -murmuré, tratando de mantener un rostro neutral-. Es gracioso que saques el tema ahora. Verás, Dean, tengo algo que contarte...

Aparté la mirada de la ventana y me volví hacia mi hermano para clavarla en sus ojos.

-Te lo juro, Dean. Lo de los poderes...se ha acabado. Para siempre.

Termino de cerrar la bolsa dirijo una mirada a mi hermano –que tienes que contarme Sammy- Por como estaba mirado algo bueno no era… de nuevo cambio de tema hablando de sus poderes, algo que estaba completamente seguro de que (no era el otro tema que dejo a medias)–que estas ocultando de nuevo Sammy- estaba cansado de las mentiras de mi hermano, ya fue suficiente cuando me mintió sobre Ruby de que arrancaba demonios con su mente ¿hasta que punto puedo aguantarlo todo? En ese momento pesen en lo que hable con mi hermano sacar el tema de Jess pero nah no creo…que sea de nuevo pesadillas o peor aquellos sueños premonitorios

– No habrás soñado con Jess- observo a mi hermano esperando una respuesta pero parece que no quiere hablar o le cuesta –Sammy te conozco bastante bien, se cuando estas mal o tienes que decir algo te cuesta así que…dime ¿Qué te pasa? Maldita sea Sam –lanzo la bolsa algo enojado-estoy cansado ¿Qué nos ha pasado? Antes nos contábamos todo ahora…parecemos unos desconocidos ocultarnos cosas ¿crees que papa quería esto para nosotros?-

Nombrar a mi padre fue un golpe duro, después de todo mi padre hizo todo lo posible para unir a la familia pero el destino lo cambio, fue su vida la que dio por mi por su hijo. Algo que recuerdo y dios…no puedo aguantarlo más- Sabes antes era distinto yo se que…-volteo sin mirar a mi hermano, intento ocultar aquello pero no puedo más. De nuevo me doy la vuelta mirando a mi hermano a los ojos

–lo admito me he equivocado muchos aspectos, pensando que era lo mejor opción pero no…me estado equivocado mucho no eres el único que vive cada día luchando para seguir adelante. Porque a veces me cuesta mucho Sammy, tanto que no puedo más hermano estoy cansado agotado y no puedo más ver como te estas convirtiendo-me quedo callado, paso saliva intento ser sincero, con mi hermano pero cuesta tanto expresarlo todo...

Seguí de espaldas a él, contemplando el débil reflejo de la habitación para ver como mi hermano preparaba la bolsa para irnos de una vez por todas. No era una imagen muy nítida, pero al menos servía para poder descifrar la expresión de mi hermano sin tener que darme la vuelta y mirarle de frente. No me atrevía a hacerlo, a girarme y a encararle mientras le contaba que Jess había regresado de entre los muertos y que probablemente fuese cosa de los ángeles por algún motivo que desconocíamos. Cass me había prometido investigarlo, pero a saber cuánto tiempo podía tardar en conseguir algo, y mientras tanto yo tenía que cuidarla y vigilar que no intentasen nada. Porque a saber qué era lo que tenían planeado para ella, seguramente fuese una treta más para arrancarle el sí a mi hermano.

-Dean, yo... -comencé, con voz baja.

De nuevo la desconfianza, el temor a que le estuviese ocultando algo malo, algo grave, se hacía patente en su voz y en su rostro. Desde lo de Ruby, aquello siempre había estado patente en él. Sabía que lo había decepcionado, que era un estúpido por haberme dejado llevar por Ruby, por haber escogido a un demonio en vez de a mi hermano. Por no haber sabido refrenar aquella maldita sed de sangre demoníaca, de aquel poder casi embriagador que me había hecho sentir como si yo solo pudiese derrotar a todo el infierno y salvar a mi hermano de tener que hacer algo que le iba a costar y a doler. Había abierto una brecha entre ambos que casi era insalvable, y le había hecho mucho más daño a mi hermano del que nunca hubiese podido prever.

-No, no he soñado con Jess -murmuré-. Últimamente todo está tranquilo, Dean. Pero tengo que contarte algo relacionado con ella -murmuré.

Bajé la cabeza, acusando el golpe cuando habló de papá. No, él nunca hubiese querido eso para nosotros. Ni mucho menos hubiese querido ver en lo que me estaba convirtiendo yo. Había consagrado su vida a salvarme de aquello, y yo había caído como un idiota en la trampa de los demonios en cuanto se había presentado la primera oportunidad. Era un fracaso como hijo y como hermano.

-Dean yo....yo sé que estás agotado. Lo siento mucho, hermano. Si pudiera volver atrás en el tiempo y no confiar en ella, lo haría. Pero ¿qué otra cosa podía haber hecho? Yo estaba perdido y tú no estabas conmigo para guiarme. Lo único que deseaba era vengarte y ella me lo puso en bandeja...

Escucho a mi hermano estaba seguro de que algo estaba ocultando, de que no se trataba de algo que tenia que ver con su adición a la sangre demoníaca o la perra de Ruby. Ya paso esto aunque no puedo ganar la confianza tan rápido necesito tiempo se que cuesta pero es así necesito poder ganar la confianza de mi hermano, no se trata de construirlo en un día o dos era mucho más a pesar de que se arrepentirse de ello aun estaba el dolor reciente pero no puedo estar siempre con la misma mierda, terminaría loco algo peor perdería a mi hermano de nuevo. Asiento levemente acercándome a la puerta sin mirar a mi hermano me llevo la mano a la barbilla de nuevo hago frente a la situación como puedo, aunque estaba casado de aquello de tanta mentiras de tanto secretos tenía que ser el duro de poner cara de póquer ¿Qué otra cosa puedo hacer? Asiento levemente me miro a mi hermano

–Sammy vas a decirlo o te pateare tu trasero ¿Qué sucede? O vamos será peor de lo que estamos… estamos en mitad del fin del mundo así que creo que estoy acostumbrado a las malas noticias, puedes ser sincero por una vez contarme lo que pasa.- Me cruzo de brazos esperando una respuesta razonable o al menos de dejar el tema del misterio, algo me estaba volviendo loco aun estaba a punto de explotar necesito una respuesta o terminare algo peor que mi amigo Jack en el resplandor. Miro a mi hermano sigo esperando rodee mis ojos arriba – espero que no sea que has visto a casper el fantasma sanguinario en faldas te has traumatizado de por vida – se que a veces que digo cosas no viene al cuento pero es una forma, más bien de romper aquella tensión que había en el ambiente una tensión que se podría cortar con un cuchillo de mantequilla.

Aguardó a que yo hablase sin decir nada. Aquello era duro para ambos, lo sabía muy bien: antes nunca habíamos estado tan separados como ahora, con una barrera de desconfianza y de cierto rencor entre ambos, tan espesa como mil muros de hormigón. Antes siempre había podido confiar en mi hermano, en que me creería dijese lo que dijese, y él había sido capaz de dejar su vida en mis manos sin siquiera pestañear. Pero eso se había acabado en el momento en el que Ruby me habló por primera vez y comenzó a meterse entre ambos. Aún ahora, después de morir a nuestras manos, su sombra seguía causando problemas entre Dean y yo.

Me pregunté si alguna vez lo lograríamos, si alguna vez conseguiríamos romper aquella barrera que nos separaba a ambos y comenzar a rehacer aquella amistad y confianza que nos había unido en el pasado, al margen del hecho de ser hermanos.

-Está bien, Dean. En realidad...No es algo malo, al menos no del todo... -comencé, aún de espaldas a él.

Titubeé, pero finalmente me decidí a decirlo todo de golpe, sería más sencillo para ambos.

-Es sobre Jessica....Ella...Ella ha...Ella ha regresado, Dean. Está aquí, en Townhidden -dije por fin, volviéndome para mirarle a la cara.

Debe ser nuevo esto la nueva moda de (regreso al mas allá) o come on please no puede estar pasando esto, sola falta ver a Carol Anne para ir hacia la luz. Paso saliva comienzo a reír -¿Qué? Estas diciendo que Jessica ha regresado de entre los muertos, estamos en un especie de video estilo Michael jackson thriller –arqueo una ceja carraspeo – come on bro ¿es una broma verdad? –Me quedo mirando a Sammy por lo que parece un libro abierto cuando se trata de sentimientos hacia la mujer que perdió, y tanto le afecto. Me quedo algo serio antes de volver hablar decirle algo a Sammy ( que puedo decirle yo ahora) hasta que encontré las palabras exactas –Eso no es nada bueno bro, nada bueno cuando se trata de Jessica que estaba muerta. Si ella ha regresado no debemos de bajar la guardia lo primero es averiguar quien demonios esta haciendo esto ¿y porque?-Observo a mi hermano

Se quedó callado unos instantes, mientras cientos de pensamientos le pasaban por la cabeza y se reflejaban en su rostro. Podía ser que yo resultase a veces un libro abierto para los demás, pero mi hermano también lo era para mí: no en vano siempre había sido mi héroe de niños. Ni siquiera ahora había cambiado eso, a pesar de toda esa mierda que se nos había caído encima y que nos causaba tanta desconfianza mutua. Para mí, Dean siempre sería el mejor.

Le miré en silencio cuando comenzó a hacer aquellas bromas tan típicas suyas.

-No, Dean -repuse.- No estoy de broma. Jess ha vuelto. Yo tampoco podía creerlo, pero la he visto, he hablado con ella. Es Jessica de verdad.

Asentí gravemente a sus palabras.

-Está confusa. Ni siquiera recordaba haber muerto hace seis años: pensaba que solo habían pasado un par de meses desde aquella noche, que simplemente yo no volví a casa. Creo que es cosa de Zacharías -murmuré.

No me jodas ¿el cara gorda? maldito hijo de perra, no se Sammy pero ¿porque razón Zacarías ha regresado a Jess? esto...es superable, Ángeles demonios, muertos saliendo de sus tumbas a esto es el maldito Apocalipsis. Creo me duele la cabeza de pensar más -

miro a mi hermano serio - no se, pero nada bueno traer los muertos a la vida nada bueno hermano...

Miré a mi hermano, que reflejó en voz alta las preocupaciones que ocupaban mi mente. ¿Para qué iba a devolvernos Zacharias a Jess? ¿Qué beneficio le podía reportar eso? Y, si no habían sido los ángeles ¿qué beneficio les podía dar a los demonios el traerla de vuelta?

-No lo sé, Dean -murmuré, revolviéndome el cabello.- Ni siquiera sé si ha sido él o quien ha sido o... yo que sé. Ésto es un desastre que se nos va de las manos, es demasiado grande para nosotros dos solos, hermano.

Asentí.

-Los muertos deberían quedarse donde están -repuse en voz baja, repitiendo una lección bien aprendida despues de tanto tiempo.- Lo mejor será que nos vayamos a comer de una vez -agregué.- No es bueno pensar con el estómago vacío -agregué, con un asomo de sonrisa en los labios, mientras abandonaba la habitación

-Será mejor que si, vamos a comer -

Le dije a mi hermano, algo preocupado por toda esa mierda que tenemos que liderar. Joder cuando va a ver algo bueno, para nosotros. Porque tenemos que seguir luchando ¿Y para que? ¿Para morir? Que demonios podemos hacer si no, aceptar nuestro destino.

-Burger King o McDonald's. Espera -arqueando ambas cejas, dibujando una sonrisa -Jajaja podemos ver a tu novio el Ronald McDonald. Creo que te echa de menos.-

Sabía que aquello era tan duro para mí como lo era para Dean, quizás incluso más para él, que tenía a los ángeles encima, presionándole para que aceptase a Michael dentro de su cuerpo y sabiendo que mucha gente moría mientras él seguía negándose. Admiraba a mi hermano por su determinación, pues no mucha gente hubiese resistido de la forma que él lo hacía.

-Que te den, tío -repuse mientras, a mi pesar, en mi rostro se dibujaba una sonrisa ladeada.

Abandoné la habitación despues de mi hermano, cerrando la puerta tras nosotros.