Un alto en el camino [+18]

Le sonrei ante su descareza estando la camarera aun esperando a que yo dijera algo, me gire mirandola a la camarera mientras hablaba dirigiendome hacia la cazadora.

- Tu no pero quizas ella si *le sonrei ampliamente haciendo que la camarera rubia se sonrojara, aun sentia los latidos de varios corazones, el de la rubia y mi acompañante, quizas algo nerviosa?*

Me gire mirandola ahora a ella.

- Quien a dicho estar con alguien como yo? *le sonrei* - Como tu has dicho seguirias mi juego?

Le miré con odio al vampiro, me pasé una mano por el flequillo apartandomelo un poco de la cara, miré a la camarera, que apuntó algo en su libreta y se fué.

-Mira..., normalmente no entablo conversación con seres a los que probablemente...-Me silencié cuando la camarera volvió con mi botellin, lo dejo en la mesa y se fué sin decir nada-. Maté cuando salgamos de este local.

Agarré el botellín y le di un gran trago, dejándolo de nuevo en la mesa.

-¿Por qué te intereso tanto? Normalmente cuando enseño mi puñal los de tu especie salen corriendo...

Me recoste en la silla dandole una ultima mirada a la camarera que se giro en el momento en que noto que le miraba para sonreirme cordialmente, volvi mi vista a la cazadora para responder su pregunta.

- Normalmente te topas con vampiros algo cagados, pero, pequeña, soy la excepcion de este pueblo, no me asusto con facilidad

Quizas siempre habia sido demasiado masoquista por meterme en problemas, pero, aun siendo un humano lo habia echo, porque siendo vampiro tenia que convertirse en todo lo contrario cuando era de alguna manera casi inmortal?

-¿Crees que sólo me he enfrentado a demonios inferiores y a vampiros de poca monta? -Le pregunto bebiendo de nuevo del botellín-. ¿Por qué te gusta torturar a los humanos? Quizás sea porque ellos no saben como matarte y creen que eres inmortal..., no dejaré que me engañes-Dije bebiendo del botellín y dejandolo otro vez en la mesa.

Una carcajada resono en toda la estancia, no subestimaba cuantas peleas habia tenido con seres sobenaturales en su vida, pero, tampoco decia que fueran unos seres realmente perversos, los sobrenaturales no eran tan estupidos como para dejar vencerse por una humana, aunque quizas aquella cazadora era realmente buena en su trabajo.

- Torturarlos? Simplemente los confundo y dejo que hagan todo cuanto quieran, eso es torturar? Porque si lo crees no sabes lo mucho que puedo llegar a torturarlos pequeña

Me colgué el bolso cruzado y me levanté de la silla, ese vampiro estaba sacandome de mis casillas, saqué mi billetera y deje un billete e 20 dólares encima de la mesa.

-Tienes suerte que no te haya matado, sal detrás de mí y no dudaré en hacerlo-Le dije desafiante, le di un último trago a la cerveza dejándola de nuevo en la mesa-. Sígueme y estas muerto.

Salí del local ganándome unas miradas de los clientes, mi coche estaba aparcado un poco apartados de todos, me senté en el maletero y saqué un cigarrillo para encenderlo para luego llevarmelo a la boca, sabía que aquél vampiro no me dejaría ir sin mas...

Tras ver como salia del bar/restaurante, espere alguns segundos a que la camarera diera su acto de presencia nuevamente, comiendomela literalmente con los ojos, viendo como a ella le encantaba aquello. Me levante con una sonrisa en mis labios pasando por su lado.

- Una pena que me tenga que ir tan pronto *dije guiñandole un ojo*

Sali de alli dentro yendo hacia un coche con el maletero abierto, devia estar alli la cazadora. Me pare a su lado contemplando la gran coleccion de armas que llevaba consigo.

- Bonito cargamento

-Y todas la sé usar a la perfección-Le dije apagando el cigarrillo en el suelo con la punta del tacón-. La que más me gusta es esta...

Saqué una pequeña pistola de agua de juguete, podía parecer ridicula, pero llena de agua bendita podría ser muy eficaz, me acerqué a el vampiro y le apunté con ella en medio de su vientre.

-Dame una sola razón para dejarte con vida-Dije mirandole a los ojos, que los tenía de un negro increible.

Intuia que aquella peculiar pistola que vendian en cualquier tienda lo bastante barata llevaba un cargamento algo menos peculiar que no simple agua, preferi simplemente sentarme en el maletero contemplando como aquella pistola se dirigia a mi directamente.

- Se me ocurren muchas razones aunque la principal es.. *dije antes de aparecer detras suyo coger la pistola y tirarla a suelo haciendo que su contenido se esparciera* - Que soy mas rapido que tu aparte de la simple atraccion que sientes por mi

-¿Que te hace pensar que siento algo por ti?-Le pregunté dándome la vuelta para mirarle con odio-. Si, es odio a lo que te refieres, ¡premio! has acertado, por que nunca, jamás sentiría algo por alguien como los de tu especie...-Le dije apuntándolo con el dedo dándole golpecitos en sus pectorales.

Le cogi la mano acercandola hacia mi haciendo que su cuerpo se apoyara encima del mio por unos instantes.

- Me encanta que me odien *le sonrei* - Sobretodo que tenga prioridad por ser un vampiro *me lami los labios*

Una de sus manos fue directa a mi rostro, la cogi al vuelo.

- No tan rapido pequeña *me junte aun mas con ella asta besar sus labios*

Disfruté del beso unos segundos, pero a mi mente resonaron las palabras vampiro varias veces, lo que consiguió que me separase de él, pero seguía teniendo mi mano en la suya y tuve que quedarme pegada a él.

-¿Qué parte de la que te odio no has entendido?-Le pregunté susurrando intentando separarme de él-. Si te hubiese conocido en tu vida normal quizás podrías haber tenido algo conmigo..., pero los vampiros..., eres contra lo que lucho, ¿No te das cuenta?

Resople ante su comentario. Si me hubiera conocido como humano seguiria huyendo de mi, no siempre he sido demasiado paciente antes de matar a cualquiera, ahora que lo pensaba, como humano quizas era peor.

- Si, creo que me doy cuenta *dije riendome* - Me va lo prohibido pequeña

Me solté de su mano y me senté a su lado, cruzando los pies, recogiendo la pistola de agua hechándola atrás en el maletero, lanzando un suspiro cansada.

-¿Por qué te empeñas tanto en mi?-Le pregunté mirándolo de arriba a abajo-. A parte del rollo de lo prohibido, tiene que haber algo más.

Puse mis manos en sus caderas atrayendola hacia mi, quizas hubiera algo mas en aquella simple atraccion que sentia por ella, por lo menos durante un par de horas, luego lo mas seguro es que simplemente me odiara como jamas lo habria echo e intentara matarme.

- Simplemente lo prohibido me pone lo suficiente como para atraerme, sin contar, que cada vez que te toco me juego mi propio cuello

Sabia que no se iria por las ramas a la hora de acabar conmigo, pero, tenia algo a mi favor, la rapidez y fuerza.

Sonreí ante sus últimas palabras, todavía no había habido ser que le había perdonado la vida, noté sus manos frías sobre mis cadera y cerré los ojos, ese vampiro tenía algo..., negué la cabeza deshechando ideas que pasaron por mi cabeza.

-Bueno, podría matarte cuando quisiese y lo sabes de sobra que no me lo pensaré dos veces, ¿Pero tu mematarías a mi?-Le pregunté susurrando juntando un poco sus labios con los suyos.

Sonrio complacido por su juego, quizas no era tan estupida como habia creido que eran todas las humanas, la acerco aun mas a mi haciendo que mi entrepierna quede muy cerca del suyo.

- Puedo decir lo mismo que has dicho tu pequeña *digo sonriendole* - Aunque puedo hacer una excepcion ante el placer

Las cazadoras son mas duras de lo que creo, no me fio ni un poco de ellas pero parece que empieza a cambiar de opinion. Junto finalmente mis labios con los suyos haciendo que mi lengua toque la punta de la suya mientras mis manos la acercan a mi aun mas.

Termino cediendo ante los encantos de aquel vampiro..., subo a sus piernas y el coche se mueve un recordandome en donde estabamos, pero sus labios eran tan fríos..., nunca había besado un vampiro. En cierto modo tenía algo de curiosidad.

-Nos mataremos en algún otro momento, supongo-Susurro antes de abrir sus labios con los míos e introducir mi lengua para buscar la suya.

Me gustaba aquella humana, lo suficiente ardiente como para llegara un alto grado de lujuria, eso mas mis experiencias en aquel ambito, podia llegar a ser la gran explosion. Se sento en mis piernas poniendose justo encima de mi entrepierna.

Nuestras lenguas juegan con lujuria dentro de nuestras bocas haciendo que salgan a la luz en algunos momentos. Mis manos acarician sus piernas subiendo asta su cabello donde lo coge con furia haciendo que eche hacia atras su cabeza y beso su cuello con demasiada necesidad asta volver a sus labios mordiendo su labio inferior.

Giro el cuello cuando empieza a besarme, una idea algo descabellada pasa por mi mente, me acerco a su oído para susurrarle.

-Muerde...-Le digo al oído para luego pasar mi lengua por el mismo, me separo de él y me aparto el pelo hacia un lado para que vea mi cuello-. Pero como te pases...-Estire una mano detrás de él, cogiendo una estaca de madera que clave sutilmente en su costado-. Estas muerto.

Me gustaba la idea de sentir aquella atadura detras mio, quizas algo masoquista pero morboso a la vez. Le sonrio de una manera lujuriosa, mientras lamo su cuello con la punta de mi lengua, poco a poco voy clavando mis colmillos haciendo que un gemido se escape de sus labios y de los mios un simple sonido de placer, empiezo a succionar llevandome algo de su sangre asta que noto como su mano tira de mi cabello, me echo hacia atras sin ningun problema.

Me lamo los labios antes de besarla nuevamente.

Tiré del pelo de Jeremy, sentía una sensación extraña entre placer y dolor, cuando me extrajo la sangre, sentí marearme y como la piel se me erizaba debajo de las opas, solte la estaca ahogando un gemido de placer, apoye la cabeza en el hombro de Jeremy esperando a que se me pasase esa sensación.

-¿Es normal que ahora sienta pasión por ti?-Le pregunté mirándolo a los ojos-. ¿Se me pasará?

Le sonrei mientras hacia que su cabeza se echara hacia atras, lamia con la punta de mi lengua la herida que le habia echo, haciendo que no quedara rastro de sangre en ella, me separe mirandola directamente a los ojos, desafiandola.

- Pasion no se si seria la palabra adecuada *bese su cuello* - Es mas bien lujuria *dije en un susurro haciendo que toda su piel se erizara nuevamente* - Y misterio lo que sientes

Sintió un escalofrío al notar su lengua sobre mi cuello, aparto la mirada de sus ojos, aprentando la mandíbula, arrepintiendome de lo que acababa de hacer con aquél vampiro...

-¿Y tú vas a resolverme ese misterio?-Le pregunto desafiente apartandome un poco de él, coloco mis manos sobre sus pectorales, llevo mi mano hacia donde se spone que debería haber un corazón latiendo...

Mi expresion cambia totalmente cuando apoya sus manos en mi pecho, quizas buscando algo que latiera alli dentro, le cojo de la manos entrelazandolos por mi cuello.

- No encontaras nada alli dentro que lata lo mas minimo, lo sabes *digo arqueando una ceja* - Y si, puede que resuelva tu misterio sino es que me tienes miedo *sonrio maliciosamente*