Cold desert (Bedisa)

Normalmente no estaba tan torpe ni tan poco cariñoso, aquel no era mi Jake de siempre, me lo habían cambiado por un perrito torpe y sin libido... que mala suerte.

-Jake ¿pero qué te pasa?- dije acariciando su mejilla, fingiendo preocupación. -Normalmente, a estas alturas, ya tendrías las manos debajo de mi falda- no le di la oportunidad, me puse de pie y comencé a pasearme por el claro sin alejarme demasiado.

Si lo sabia, era poco tipico en mi ser como estaba siendo en aquel momento, pero, habia algo en ella que me tiraba hacia atras, no negaba que a aquellas alturas Bedisa estaria gimiendo como una loca y mas teniendome a mi cerca aun asi queria saber ante todo que tenia que hacer. Me levante del suelo sentandome en el filo del acantilado haciendo que mis pies colgaran de alli.

- No niego que no tenga ganas -dije mirandola- Pero dime que coño quieres de mi y luego te dare el placer de ser el mismo Jake de siempre

Todo cuanto me dijera la nueva Bedisa bruja seria negado, aunque claro estaba que poder, podia tener y bastante aun asi tambien estaba del todo claro que se habia vuelto mucho mas perversa.

¿Por qué tenía que querer algo? Vale, siempre quería algo de alguien, pero aquella vez simplemente le regalaría mis serivcios no solicitados como vidente. -Hace tres semanas, tirando basura, encontre una foto nuestra y tuve una visión- aunque en los últimos años había logrado controlar bastante los flashes y las viosiones, de vez en cuando seguían pillándome por sorpresa. -Pensé en dejarlo pasar, pero cada vez van a más. El motivo de que existan personas como yo, que pueden ver lo que va a suceder es porque el futuro puede cambiarse. Cada pequeña decisión crea un nuevo camino, Jake, y dentro de poco ese camino te traerá aquí con una personas que no es precisamente de tu agrado...- ¿y qué persona de su pasado que conocíamos antes podía ser? Que adivinara o que preguntara, lo que prefiriera.

Arquee una ceja mientras iva atando cabos vale, la unica persona humana que queria ver muerta y no soportaba era mi padre, aun asi, hacia años que no sabia de el, no pensaba que fuera a aparecer ahora de la nada como un fantasma y fuera a ir directo hacia mi, mas le valia que no lo hiciera, seria yo quien acabaria con el, con mis propias manos sin ningun tipo de remordimiento.

- Porque me dices esto Bedisa? -dije dejando de lado mis pensamientos- Hay algo mas que deba saber?

Siempre que decia algo y lo dejaba a medias es que habia mas, sabia de quien se trataba ahora debia saber para que y que pasaba entre el y yo, ambos sabiamos que a fuerza mi padre no me ganaria, en aquellos tiempos el estaria demacrado por la edad, debia tener unos 60 quizas mas. No dijo nada, simplemente se mantuvo callada. Me levante yendo hacia ella cogiendola por los hombros de una manera un tanto brusca.

- Dimelo

Reí cuando me agarró, podía notar lo tenso que se había puesto, sabía que había tocado un tema que no le gustaba en absoluto. -¿Por qué este lugar? Él no lo conocía y tú no le traerías aquí... así que comencé a tener en cuenta la posibilidad de que yo tuviera algo que ver en esto- ¿Y qué mejor manera de averiguarlo que preguntar directamente al padre maltratador y alcohólico? En prinicpio no tenía pensado aparecer en Townhidden ni interesarse por su hijo, así que si quería más respuestas tenía que tener en frente a Jake para tener la posibilidad de ver algo más. -Matarle te haría sentir muy bien, lo sé, porque cuando no impedí que la mataran a ella- a mi quería mamaíta - me sentí realmente viva- ¿Quién hubiera imaginado que yo misma le popondría a Jake matar a alguien? Lo creyera o no, yo me beneficiaría mucho más que él.

Ahi habia algo que me ocultaba estaba seguro, Bedisa, dandome la idea, la cual siempre tenia presente, de matara a mi padre? Habia gato encerrado. Algo habia echo mi padre, algo me habia echo a mi o a ella quien sabe, en su pequeña vision, algo que me estaba ocultando con mucha insistencia. La cogi con mas fuerza haciendo que su cuerpo chocara contra uno de los arboles.

- Sabes como me pongo siempre que sale el tema de mi padre -dije casi gruñendo- Ahora dime que sacas tu de ello? Porque cojones quieres que lo aniquile cuando ya sabes que lo haria encantado?

Lo sabia debia controlar mis impuslos de licantropo pero no podia evitarlo y ella lo tenia presente, parecia que le encantaba la idea de enfurecerme a mas no poder.

- Que me escondes Bedisa? -dije gruñendo-

De haber querido, y quería, podría tener en el suelo gimiendo, pero de dolor, un pequeño regalito de Odette, pero prefería provocarle, enfadarle, me importaba realmente poco el daño físico que pudiera causarme porque hasta ese momento verle de ese modo sólo me hacía desearle todavía más.

-Tu sólo hazlo ¿qué es lo peor que puede pasar?- un rato antes se reía porque no creía que yo pudiera asustar a la policía y ahora me tenía contra un árbol, en plan amenazante para intentar sonsacarme una información que no iba a darle. -Esto empieza a gustarme ¿a ti no?-

La solte de golpe bajando la cabeza y dandome la vuelta para de golpe volverme a girar y descargar toda mi ira en el arbol que habia justo detras suyo algo que la cogio por sorpresa asta a ella, las astillas del arbol me hirieron la mano que no tardaria en sanar mientras el propio arbol caia por el impulso del golpe.
Ahora simplemente se pasaba por mi cabeza la idea de quien le habia vuelto asi, la unica demonio con suficentes dones de malicia que habia podido conocer por el pueblo hacia unos años, Odette, la demonio peliroja.

- Te ha entrenado bien la peliroja, nunca me hubiera imaginado que alguien como tu pudiera ser peor que yo mismo-me acerque a ella- El juego solo acaba de empezar, acabaras por asustarte de lo que soy capaz pequeña -acaricie su rostro para luego apartarme de golpe-

Lo que no queria que hiciera, era traer a aquel estupido humano asta alli, entonces si que pondria en peligro asta su propia piel.

Empecé por conreír para acabar riéndome de él en su propia cara, cosa que sabía que iba a molestarle. -Siempre igual, deberías pensar en cambiar de rollo- porque siempre estaba con lo mismo, acabaras por asustarte de lo que soy capaz... Había conocido a más como él, a más mucho peores que él y ahí seguía, quizás esta vez sería él quien se sorprendiera de lo que podía hacer yo. -¿Crees que te habría traído hasta aquí y te habría puesto sobreaviso si no supiera como defenderme de un ser inferior como tú?-

Razones no le faltaban aun asi no sabia si lo mejor que podia hacer era ir provocandome como lo estaba haciendo en aquel momento. Debia controlarme, sabia de que era capaz una bruja y mas estando en las manos de Odette, podria llegar a ser bastante cruel, pero asta conmigo? El tio que supuestamente la conocia mas que a el mismo?

- Inferior? -me eche a reir- No presumas tanto de tus poderes, no eres la unica que a estado durante un tiempo con tu amiguita demonio

Ella no conocia la parte mas licantropa de mi, la que siempre salia a la luz cuando estaba con gente que me agradaba la suficiente como para no tener en cuenta nada mas. Me fui acercando a ella con paso firme, poniendo una de mis manos en su hombro y haciendo algo de presion en el mientras acercaba el resto de mi cuerpo, bese su cuello, pasando mi lengua por alli.

- Lo que no tienes presente es que se tus puntos debiles encanto

Había logrado hacerle sangrar ya unas cuantas veces y no había tenido que utilizar ninguno de mis poderes de bruja, todavía no me había visto presumir... y no quería hacerlo.

Se aceró a mi, sujetándome y besando mi cuello. -Los sabías...antes- en pasado, porque si creía que tocando en ciertas zonas o sacando ciertos temas de conversación iba a lograr enfadarme o hacerme daño, estaba muy equivocado. Bajé una de mis manos por su espalda hasta llegar a sus pantalones, donde cambié de rumbo hacia la hebilla de su cinturón.

Lo sabia antes y ahora, podia llegar a saber como pensaba una tia como ella, era perversa pero seguia habiendo la misma Bedisa debajo de todo aquello, quizas asta me gustara mas la nueva viendo como iva directa a mi cinturon desabrochandolo. La mire con el ceño bruncido mientras destaba mis pantalones.

- Antes? Y como es la de ahora?

Bese sus labios intensamente jugando con su lengua, podia hacerme una cierta idea de como se habia vuelto la nueva Bedisa, mas morbosa, mas sadica, lo que tenia que tener cualquier tia para ponerme.

- La nueva Bedisa, estara dispuesta a jugar con Jake?

Me besó mientras yo me encargaba de deshacerme de sus pantalones, ese era el mismo Jake de siempre, el que cambiaría su alma por un polvo, demasiado sencillo.

-La nueva Bedisa... tiene cosas mucho mejores que hacer- dije apartando mis manos de su cuerpo y esperando a que él hiciera los mismo ¿me hacía la difícil o hablaba enserio? Quien sabe, pero estaba segura de que aquello le hacía desearme todavía más porque no se apartaba de mi, así que tuve que apartarlo yo y fui suave, sólo lo lance al otro lado del claro con un simple movimiento de mi mano ¿le recordaba a la pelirroja o ella había sido más sutil?

Me lanzo lejos de donde ella estaba, empeze a reirme estirandome en el suelo mientras ella se quedaba algo parada ante mi reaccion, estaba en ropa interior con la camiseta puesta, algo bastante patetico y mas viniendo de lo que habia echo ella.

Me levante en un instante poniendome delante suyo, no contaba con la rapidez que me caracterizaba. La examine de arriba a abajo, si, por lo visto, habia adquirido unos poderes la mar de buenos, aquello simplemente me ponia mas.

- Sera igual el sexo con una bruja que con una simple humana?

Sin esperar una respuesta por su parte me lanze encima de ella arrancando su ropa con mis dientes dejandola en ropa interior para luego morder su labio inferior, lamiendo la sangre que le habia provocado yo mismo.

Tan violento como siempre ¿tanto lo deseaba?
Me arrancó la ropa, literalmente, y se lanzó sobre mi, mordiendo mis labios hasta que logró hacerme sangrar. No era nada nuevo, siempre que había estado con él, excepto las primeras veces que había sido lago más suave, hubo sangre de por medio. -Eso depende del grado de dedicación que le ponga... o de la humana con la que comparea- no, la verdad es que sólo dependía de lo primero. -¿Sabes? Esa policía que suele sacarte de líos no me gusta nada... quizás deba hacerle una visita- comenté, mientras Jake besaba con deseo mi cuello.

Segui besando su cuello atendiendo a lo que me decia en todo momento mientras de vez en cuando emitia algun gruñido al sentir sus manos clavandose en mi espalda. Baje los tirantes de su sujetador para luego besar sus senos y morderlos haciendo que ella no pudiera reprimir un gemido, sonrei ante ello, lo que si estaba claro era que le seguia poniendo lo mismo de siempre.

- Mantenla con vida si no quieres que sea yo el que haga visitas a tus amiguitos o amiguitas -dije apartandome por unos segundos- Si quieres que me meta en lios y me metan entre rejas matarla es lo mejor que podras hacer aunque tendras que deshacerte de unas cuantas mas de aquella zona -me rei-

Si creia que la policia era la unica de aquella comisaria que habia frecuentado mi morada lo llevaba claro. Baje por su estomago asta llegar a sus muslos donde pase mi lengua por su ingle clavando mis dientes nuevamente alli, la mordi con mas fuerza.

Cualquier hombre tan pasional como Jake podía hacerme gemir, que no se lo creyera demasiado. -No necesito matarla para meterte en problemas- no necesitaba matar a ninguna, podía hacer que Aurora perdiera su trabajo, podía hacer que asignaran a Jake a un policía al que no podría comprar con sexo, podía hacer lo que me diera la gana sólo para hacer que lo pasara mal... al fin y al cabo, él me lo había hecho pasar muy mal a mi y nunca es tarde para vengarse. -Jake, me aburres...- musité al sentir como me mordía con fuerza, no era un filete, que no se equivocara, era cruel ahora, pero no por ello tan sádica como podíapensarse.

Tenia que reconocer que se habia vuelto mas fuerte, tenia mis brazos amordazados por raices de un simple arbol que por lo visto era bastante fuerte, no conseguia deshacerme de el, simplemente mover unos milimetros la raiz no lo suficiente.

- Porque fue el primer lugar donde le dije a la unica tia que me habia gustado lo que sentia por ella, por eso odio tanto este lugar -me hacia sentir bulnerable estar alli sobretodo con ella-

Parecia que mi respuesta la cogio por sorpresa, tanto como para poder deshacerme de las raices y cogerla a ella amordazandola conta el suelo poniendo mis manos en cada muñeca.

- Sorprendida quizas?

Sí, realmente sorprendida, aunque no muy gratamente. Lo tuve encima en segundos, todo por despistarme un instante, y le miré con mi ojos de cachorrito. -Pues sería a otra chica, porque ya me dejaste claro más de una vez que lo nuestro no había significado nada para ti- ¡oh! sí, que mal me sentía y blablablá.
En verdad no me importaba, tampoco le importaba a él, pero mis capacidades como actriz habían mejorado notablemente y aprovechaba el momento en el que él creía que había tocado una fibra sensible.

Me rei, que dura se habia vuelto la pequeña Bedisa que ni siquiera sabia defenderse sola cuando era una cria, siempre tenia que estar detras suyo auyentando a todo tio que intentara meterle una mano encima o sacarle algo que no me salia a cuenta.
Volvi al ataque, parecia que ella estaba mas dispuesta a montarselo conmigo, quizas le traian gratos recuerdos el recordar la ultima vez que habiamos estado debajo del mismo techo, aquello habia mejorado despues de cuatro años o eso me daban a entender las tias con las que habia estado.

- Y no lo significo -dije secamente-

Bese sus labios salvajemente aquello siempre le habia gustado.

Comencé a revolverme, de querer quitármelo de encima, podía haberlo hecho, pero no quería, sólo quería seguir pareciendo tan indefensa ante él como pensaba. -Entonces por qué ocurrió- porque lo habíamos alargado todo el tiempo que ambos habíamos podido hasta cortarlo.

Aún necesitaría un poco más para llorar, las lágrimas falsas era algo que aún no tenía del todo dominado, pero tenía algún que otro truquillo emocional para llevarlo hasta donde quería llegar.

No me fiaba una mierda de ella, sabia como podia llegara pensar alguien como lo que ella se habia convertido, joder, era exactamente igual a como solia ser yo, ahora se podria decir que era un tanto mas cabron que antes. Me acerque nuevamente a ella pasando mi lengua por su cuello para luego besarlo lentamente algo que pude sentir como le encantaba.

- Porque a un licantropo como a mi le encanta el sexo, es mas facil si tienes a alguien a tu mereced -le sonrei con malicia-

Si queria jugar a ser el mas cabron, podria serlo, algo que sabia que le jodia, joder, habia cambiado pero su cabeza seguia siendo de alguna manera igual, aun asi, habia mejorado bastante tanto como madurado.

Me debatía entre seguir fingiendo y echarme a lloriquear o echarme a reír directamente y al final opté por la segunda opción, reír, mucho más que en cualquier otro momento, aquello no sólo me parecía cómico, si no que era absurdo y, por supuesto, falso. Sabía que sí hubo algo en él que le hio quererme y eso le avergonzaba lo suficiente para negarlo y enfadarse si me atrevía a llevarle la contraria. -¿Ah, pero era yo quien estaba a tu merced? Es la primera noticia que tengo- venga ¿quién se preocupaba?¿quién había sido el que había ido a ese lugar a declararse? Si hasta se había privado de estar con otras mientras estaba conmigo. Durante un tiempo obtuve todo lo que quise de él, durante más del que hasta yo misma hubiera esperado.