Intentando contar las cosas sin parecer un loco

Tras salir de mi casa, mando un mensaje a Sean:

Voy hacia tu casa, necesito hablar. Espero que estes alli.

Me guardo el movil en el bolsillo y cojo el bus que me deja justo en la puerta de su casa. Me siento al lado de una anciana que va dormida en el autobus, cinco paradas mas alla me bajo. Me acerco hasta el portal, que siempre esta abierto y subo las escaleras hasta su piso. Llamo a la puerta varias veces esperando a que me abra.

- Vamos dormilon, que ya amanecio hace varias horas.- digo al ver que me abre la puerta con cara de sueño.

Habia vuelto tarde de salir de fiesta con algunos amigos y me dormi en seguida. Ya por la mañana, mi movil vibra, indicandome que me ha llegado un mensaje. Es de Mark, que necesita verme. Me levanto de la cama y me doy una ducha rápida antes de que llegue.

Cuando termino me pongo una toalla enrollada a la cintura cuando llaman a la puerta. Oigo la voz de Mark llamandome dormilón. Le abro la puerta, aun con la toalla puesta y con otra secándome el pelo.

- No hace falta que grites, enano. No estoy sordo - le digo, bromeando.

En seguida veo su cara triste y me preocupo.

- ¿Estas bien? ¿Ha pasado algo? Por el mensaje parecias preocupado, y tu cara dice lo mismo. Ven, sientate y dime que ha pasado.

Entro mirando a Sean que solo lleva una toalla encima.

- No te preocupes estoy bien o eso creo. Pero por dios tapate un poco mas desde aqui se te nota todo.- digo sonriendo y sentandome en su sofa- Nose por donde empezar, han ocurrido demasiadas cosas esta mañana, demasiadas cosas que me he enterado de sopeton y nose si queria saberlas.- digo cubriendome la cara con las manos.

Me las quito y miro a Sean, que se sienta a mi lado y me paso su brazo por mis hombros.

Sonrio a Mark al oir que dice que se me nota todo.

- Por eso hago ejercicio Mark, para que se me note. Además, si miras tanto al final te va a gustar - bromeo con él.

"Dios, que guapo es" - pienso, mientras cierro la puerta.

Se sienta y se tapa la cara con las manos. Me siento a su lado y le paso mi brazo por su espalda.

l- Vamos, tranquilizate. No será para tanto. ¿Has tenido algun problema en clase? ¿Es por una chica? ¿O por un chico? - vuelvo a bromear. - No, en serio, dime que es lo que te pasa. Sabes que no soporto verte así.

Me encanta porque siempre intenta sacarme una sonrisa, suerte que Ryan viviese cerca de el asi no perderia nunca el contacto.

- No es por nada de eso. El instituto va bien como siempre, las chicas me ignoran pero no me importa y de los chicos paso.- digo dandole un golpecito en el hombro-Es algo mas...¿serio?.-suspiro- Voy a empezar por aqui, resulta que Ryan es mi tio. Es hermano de mi madre, ella le dio la tutela semanas antes de...morir. Me lo ha ocultado durante todo este tiempo, y tambien me ha ocultado una carta de mi madre. La he leido esta mañana y...

Nose si contarle todo el contenido de la carta, nunca tenemos secretos entre nosotros. Pero nose como llegaria a tomarselo, si mi mejor amigo me contase una historia asi yo no me la creeria.

Me quedo atónito por lo que mi amigo me cuenta.

- ¿Que? ¿Que Ryan es tu tio? No tenia ni idea te lo juro, no me imaginaba que fuese algo asi. Ahora encaja todo, ya que era muy raro que un hombre cualquiera te acogiera así, sin más. Pero si no te lo ha dicho sería por una buena razon, ¿no? Mira, no te preocupes. El es tu tio, y desde que os conozco siempre te ha tratado como si fueses su hijo, y no dejará que te pase nada. Pero no es solo esto lo que te pasa, ¿verdad?

Me levanto de su lado y cojo la ropa que hay encima de la silla. Me quito la toalla y me pongo la ropa interior y los pantalones del uniforme. Vuelvo a sentarme a su lado y le hago pequeñas caricias en la espalda.

- Vamos enano, sabes que puedes confiar en mi para lo que sea.

- Ya lo se. Todos intentais protegerme de algo, siempre. Y no voy a cambiar mi comportamiento hacia el, te lo aseguro.- hago una pausa, sin saber como seguir- Y si hay mas, en la carta decian mas cosas de mis padres, como su trabajo y que fue lo que les mato pero...

Le sonrio, nunca habia tenido alguien que se preocupase tanto por mi aparte de mis padres y luego Ryan, quiero decir mi tio.

- Es demasiado dificil de contar y quiero que me prometas que no me diras que estoy loco ni nada por el estilo, bastante me esta costando a mi asimilarlo.- le miro, el asiente por respuesta- ¿Recuerdas todas esas criaturas en las que crees cuando eres pequeño? Brujas, demonios, monstruos. Pues...existen de verdad y antes de que contestes recuerda lo que me has prometido hace un momento. Por favor, no grites ni te alteres.

Mark me cuenta cosas sobre brujas, demonios y otras criaturas. Le miro atónito y sin saber que contestar.

- Mark...que...¿que estas diciendo? Vamos, no puedes estar hablando en serio, chaval. Todo el mundo sabe que eso son cosas que los mayores se inventan cuando somos mequeños...o cuando te tomas algo que no debes. ¿No te estaras drogando verdad? - le miro, pero su expresión no ha cambiado lo más minimo.

"Sigue asustado y confuso...que ganas tengo de abrazarle y no soltarle" pienso.

- No se que decir...¿como sabes que existen? ¿Los has visto?

Le miro preocupado cuando reacciona y me dice que esas cosas se las inventan, es algo que yo tambien pensaba. Hasta ahora.

- No me drogo ni nada por el estilo. Te estoy diciendo la verdado eso creo. Por lo menos eso es lo que ponia en la carta. Mis padres se dedicaban a cazarlos, bueno mas bien solo mi padre y alguna criatura de esas raras, en las que ni tu ni yo creemos ahora, les mato a los dos. No pensaras que sera una broma de mal gusto de Ryan, ¿verdad?.- digo-Yo tampoco se que creer, por eso veni aqui. Nose, tal vez entre los dos saquemos algo mas...nose...normal

- Tranquilo Mark. Por supuesto que esto no es una broma de Ryan, no le veo capaz de hacer algo así. Le conozco desde hace tiempo, y es un buen hombre. No podrías estar con alguien mejor que con él. En cuanto a esos...seres, no se que decirte. Nunca imaginé que existieran. Pero ahora que lo mencionas, a veces mi padre mencionaba casos de gente desaparecida o asesinatos misteriosos. Como el de tus padres.

Me levanto y empiezo a dar vueltas por el salón, poniendonos nerviosos a los dos.

- ¿Alguna vez fue alguien a casa de tu tio a deciros como o por que murieron tus padres?

- Gracias Sean. Gracias por creerme y ser como eres conmigo.- digo levantandome y dandole un abrazo- Que yo sepa no, Ryan dice que mi padre le dejo una caja con un diario con las cosas que hacia y como acabar con esas criaturas. Supongo que tambien le contaria que les mato y como matarlos.

Me aparto de su lado y me acerco a la ventana.

- ¿Pero sabes una cosa?. Que tu amigo sea policia tiene sus ventajas, seguro que puedes encontrar el informe del asesinato de mis padres. A lo mejor ahi pone algo extraño o yo que. Estoy muy perdido nose que hacer. Ahora me da miedo hacer muchas cosas, nose que es lo que habra esperandome a la vuelta de la esquina o debajo de la cama.

- No tienes que darme las gracias. Para eso están los amigos, ¿no? Ademas sabes que siempre he estado a tu lado cuando lo has necesitado, y ahora no será menos. Intentaré buscar ese informe, pero si el crimen se cometio lejos de aqui seguramente no este en esta comisaría. Pero hare lo que pueda, ¿de acuerdo?

Veo como se acerca a la ventana y me cuenta que tiene miedo.

- No te preocupes, canijo. Nadie se atreverá a hacerte daño. Ryan te ha cuidado muy bien siempre, y ahora que sabes que es tu tio os irá todo mucho mejor - me acerco hacia el abrazándole por la espalda y apoyando mi cabeza en su hombro - Es un hombre respetable y muy protector. ¿Sabes si está soltero? - bromeo.

- Ya se que me protegera, pero no estamos hablando de cosas normales. Ademas creo que ha decidido hacersa cazador el tambien y no quiere que yo le ayude. ¿No te das cuenta? No tiene ni idea de matar a seres paranormales y encima piensa ir el solo.- digo preocupado.

Cuando me abraza por la espalda le suelto con delicadeza y me giro riendome.

- Sean, ten cuidado con lo que le haces a mi tio. Aunque te advierto una cosa, creo que no le van los hombres. Lo siento.- digo dandole una palmadita en la espalda.

- Tranquilo, no pienso hacerle nada a tu tio. Solo bromeaba. Veo que ya te has hecho a la idea de que es tu tio, porque mira como le has protegido - le sonrio, intantando sacarle a el una sonrisa.

Voy hacia el dormitorio y cojo la camista de tirantes interior del uniforme y me la pongo.

- ¿Y que piensas hacer? ¿Ir de caza con el? No te lo permitirá, y yo tampoco. Es muy arriesgado para los dos, pero él ha decidido hacer eso, Mark. Y perdoname que te diga pero no creo que Ryan sea un hombre torpe o poco entrenado.

Sonrio al darme cuenta de que es cierto, el me pretege a mi y yo hago lo mismo con el.

- ¿Te pones de su parte? No me lo puede creer. Yo no digo que sea torpe ni nada de eso. Pero no voy a dejarle que vaya el solo, y no me lo podeis impedir ninguno de los dos. ¿Me oyes?- digo alzando la voz. Entonces veo que su expresion cambia- Lo siento. No queria gritarte. Es que estoy muy nervioso y preocupado por el. No quiero que haga ninguna locura ni mucho menos que la haga solo. Es lo unico que me queda de mi familia. Bueno y tu, que aunque no seamos familia es como si lo fuesemos. No puede perderle...

- Ven aqui - abro mis brazos para darle un fuerte abrazo.

Nunca me sentia mejor que cuando le daba abrazos a Mark. Me gustaba mucho tranquilizarle y hacerse sentir mejor, pues yo estaba bien con solo estar con él.

- No te procupes, se que estas asustado. Yo también, aunque no te lo creas. Sabes que no me pongo de su parte. Eres mi mejor amigo, casi como un hermano para mi pero, al igual que Ryan, yo solo quiero protegerte y lo mejor para ti. El sabe perfectamente que es tu familia, y sabe que no hay nadie más. Por eso no hará ninguna locura ni se irá solo a ningun lado. Todo ira bien enano, ya lo veras. ¿Alguna vez no he tenido razon?

Me acerco hasta el y le abrazo, con el me siento seguro. Se que nunca dejara que me pase nada, yo tampoco permitire que le pase algo a el.

- Bueno, la verdad es que la razon la mayoria de las veces no la tienes pero como eres muy cabezota, todos tenemos que dartela para no llevarte la contraria.- sonrio- Aunque espero que tengas razon y no te equivoques, por lo menos con esto. Oye tengo otra cosa que preguntarte y que pedirte, si alguna vez necesitamos tu ayuda para...bueno ya sabes "cazar", ¿nos ayudaras?. Bueno no mejor no hagas nada. Podemos meterte en un buen lio en tu trabajo de policia, y desde dentro puede que nos seas de mas ayuda.

- ¿Estas de coña? No pienso dejar que vayas solo a matar vete tu a saber que cosas. Ni hablar, eres mi mejor amigo y no pienso dejarte solo en esto. Lo bueno de ser policía en prácticas e hijo de uno de los antiguos polis más respetados te da algo de libertad. Además, ya sabes que mi trabajo no me gusta, solo lo hago por contentar a mi padre. Ojala pudiera decirle como me siento de verdad... - me siento en el sofá, algo triste.

Miro a Mark y le sonrio, aunque lo que quiero es ponerme a llorar, pero no lo hago por él.

- Seguro que tus padres estaban orgullosos de ti. Te querían mucho y tu a ellos también. Yo no se lo que es que tu padre te quiera. Mi padre me oida, cree que soy un fracasado. Ahora nuestra relación va mejor, pero solo porque hago lo que él quiere.

- Mira con que estemos en peligro mi tio y yo me vale, no quiero meterte a ti tambien en esto. No lo quiero, no me lo perdonaria si te pasase algo. En cuanto a lo de mis padres, supongo que si que estaban orgullosos y los tuyos lo estaran a veces les cuesta acostumbrarse a los cambios Sean. Ya veras como al final todo se arregla.-digo sentandome a su lado.- ¿Y sabes otra cosa?. nose si te servira de consuelo pero no creo que seas un fracasado. Tienes casa propia, eres policia, ¿que mas quieres?. Aunque si no te gusta nada de esto dejalo, no lleves la corriente a tu padre. Pero esto no es solo por ser policia...¿no?

Le cojo de la cara y la giro para que me mire a mi.

"¿Que qué más quiero? A ti, Mark. Pero eres demasiado jóven y probablemente no te gusten los hombres, y menos alguien como yo" - pienso, diciendome a mi mismo que suena mejor en mi cabeza.

- ¿A mi? ¿Que...que me va a pasar a parte de...eso? - digo, nervioso y temblando. - Lo que pasa es que todo esto me ha pillado por sorpresa. No me imaginaba que Ryan fuera tu tio, por no decir lo de los brujos, demonios y demás monstruos que acabas de contarme que existen. Entiende que este confundido.

Pero él sabia que no era eso, y yo también. Y el lo habia notado.

- Mark...mis padres son muy chapados a la antigua. No aceptan determinadas cosas que para otros pueden parecer...normales. No he tenido una vida fácil, ¿sabes? Estoy más tranquilo y algo feliz desde que me fui de mi casa y consegui tener este piso. No es mucho, pero es mejor que aguantar a mis padres en casa gritandome y llamandome inutil.

Le noto preocupado y triste. No me esta contando todo lo que le pasa, yo me he abierto y le he contado cosas que nadie deberia saber. Ahora le toca a el, aunque no quiera.

- Sean, nose que es lo que en realidad te sucede. Si me lo cuentas podre ayudarte, sabes que estoy aqui para eso ¿no?. No eres el unico que sabe tranquilizar a los demas ni preocuparse por ellos. Tu lo has hecho ahora mismo por mi, deja que ahora sea yo el que lo haga por ti. Abrete y cuentame todo lo que te suceda, no creo que sea mas dificil que contar por ahi que los monstruos existen ¿no?- digo preocupado.

Empieza a temblarme todo el cuerpo y noto como empiezo a sudar. Además, Mark no deja de mirarme, con esos ojos tan bonitos que tiene. Me tranquiliza con sus palabras, pero sobre todo con su sonrisa. Desde que le conocí, hace ya un año, he sentido algo especial por este enano. Le cogi cariño en seguida y le ayude a adaptarse a su nueva vida aqui, y en seguida nos convertimos en muy buenos amigos. Antes de conocerle yo casi no salia, aunque mis compañeros de turno me pedian salir a tomar algo con ellos, casi siempre preferia ir a cenar a casa de Ryan o ir al cine o a dar una vuelta con Mark.

Me hacia sentir vivo. Quizas lo que iba a hacer me haria perderle o podría confundir a Mark, pero mis sentimientos hacia él eran demasiado fuertes como para dejarlos pasar. Así que me arme de valor.

Le bese. Fue un beso corto y no se si correspondido, pues estaba demasiado nervioso como para saberlo. En seguida me aparté de él.

- Yo...lo siento Mark. Pero esto es lo que me pasa: me gustas. Y mucho - digo, levantandome y voy hacia la ventana.

Se acerca a mi muy despacio hasta que sus labios rozan los mios por un instante corto de tiempo. Cuando nuestros labios se separan se levanta hasta le ventana, confesando lo que siente hacia mi. Me quedo alli sentado en el sofa, sin saber que decir ni que hacer, solo se me ocurre irme de alli. Me levanto y me dirijo hasta la puerta. Al llegar alli, me giro de nuevo, volviendo a la habitacion con Sean. Me pongo detras suya, haciendo que se de la vuelta.

- Lo siento Sean, yo te quiero mucho pero no de esa manera. Tampoco quiero perderte por esto, podemos seguir siendo amigos, si tu lo quieres. Aunque entenderia que necesitases un tiempo para hacerte a la idea, a mi no me molesta que le guste a mi mejor amigo, me siento alagado. Pero entiendeme no es posible. Lo siento.- digo sin saber que mas decir.

- No te preocupes, si el estupido idiota empedernido soy yo. Me sentia tan bien contigo que cada vez me apetecia verte más. Y lo que es una gran amistad para ti, para mi empezó a convertirse en algo más. Quiero pedirte perdón por lo que acabo de hacer, no debi de haberlo hecho sin saber si yo te gustaba a ti o no. Perdoname por favor - y empiezo a llorar.

Me siento en el sofá y hundo mi cara en mis rodillas, tapandola con mis manos para que Mark no me vea llorar.

- No dejes de ser mi amigo, por favor. Te necesito. Prometemé que seguiremos estando como siempre. Yo me haré a la idea de que solo podré tenerte en sueños - intento bromear aunque sigan cayendome lágrimas. - No quiero perderte.

Me siento a su lado y pienso por un momento si abrazarle o dejarle llorar sin mas. Nose como le afectaria en estos momentos un contacto fisico conmigo. Al final me decido y le abrazo.

- Oye escuchame, no voy a dejarte de lado. Te lo acabo de decir, nunca te voy a dejar tirado, tendras que hacerte a la idea de que tu y yo solo podemos ser amigos, muy buenos amigos pero nada mas. Porque tendras que soportarme durante mucho tiempo, hazte a la idea Sean, que yo tambien soy muy cabezota.- sonrio- Oye, mirame. Juro que las cosas seguiran como antes, olvidemos que esta conversacion la hemos tenido ¿vale?. Yo nose nada, seguro que asi te sientes mejor.- digo levantando mi mano derecha como juramento.