Fiesta privada (Oddy)

Había oído hablar muy bien de ella y algo me decía que íbamos a congeniar a la perfección, se trataba de una demonia realmente malvada y yo como una cría de siete años me aparecí en mitad del cementerio con ilusión, no conocía a nadie aunque también llevaba poco tiempo en la tierra y estaba asqueada, tanto maldito humano a mi alrededor y sabiendo que con un simple chasquido de dedos podía retorcerle el cuello a cada uno de ellos y no podía hacerlo por los malditos cazadores aunque no me asustaban simplemente era moscas cojoneras y quería vivir tranquila.
Pero ese día esta noche no iba a ser como otra cualquiera iba a montarme una fiestecita privada con esta demonio que creo recordar que me dijeron que se llamaba Odette, esta noche no me iba a esconder y si podía mataría a mas de un humano pero no sin antes entretenerme.
Y allí me encontraba en mitad del cementerio sentada sobre una lapida con las piernas cruzadas y la melena suelta cayendo sobre mis hombros deleitándome con mi propia imanación de lo que aquella noche podía esperarme.

Oh!si!me encantaba caminar por ese lugar tan silencioso en el que tan solo habia huesos bajo tierra.Bueno,si acababan de morirse y aun no habian aparecido los gusanos,tambien tendrian piel,musculos y todas esas cosas.

Habia salido de una de mis fiestas personales que ocasionalmente llevaba a cabo en mi habitacion de hotel,fantastica,por cierto.Ya iba duchadita y libre de sangre,la verdad es que no quedaba bonito ir por ahi manchada,aunque fuera en un lugar tan solitario como el cementerio.

De repente algo capto mi atencion,sonrei y ladee la cabeza cuando vi ese cuerpo femenino sobre una de las lapidas.Me acerque a ella tranquilamente,sabiendo lo que era,como yo!Al fin,mas gente interesante en ese maldito lugar.

-Hola!pfff,creo que ha vuelto la diversion a este paraje.-añadi con sincera alegria y un tono de alivio.Esperaba que no me defraudara,que no fuera uno de esos demonios prepotentes que se creen superiores al mismisimo Lucifer...Aunque algo me decia que ella no era asi.

-Sola o esperando a alguien?.-termine diciendo con una segunda intencion.

Y por fin la vi aparecer caminando con determinación hacia mi, esboce una pequeña sonrisa cuando me hablo, me puse en pie para saludarla como creo que se merece que saluden a un demonio..
-La verdad te esperaba a ti- dije con un tono amable estirándome la mano en forma de saludo- Eres Odette verdad? Yo soy Astratea, e oido hablar muy mal de ti- Esperaba que todo lo que había oído de aquella demonio fuera cierto, y que de aquí en adelante montáramos alguna que otra fiestecita- Bueno el caso es que llevo muy poco tiempo aquí y no e tenido la ocasión de conocer a nadie como nosotras, solo a estúpidos humanos así que aun no me e divertido y cuando oí que cerca de donde yo me encontraba existía una demonio, puedo decir que me alegre y quise conocerte- La observe la verdad que el cuerpo al que había poseído aquella demonio también se lucia bastante bien- Bueno, que planes tienes para hoy quizás.. podríamos divertirnos un rato- dije mirándola a los ojos.

Me esperaba a mi!Vaya,aquello era toda una sorpresa y de las grandes.No solia despertar tan buenas vibraciones entre los demonios y la verdad es que ella era la primera que venia en mi busca.Sonrei ampliamente al escuchar que habia odio hablar mal de mi y termine por asentir mientras una carcajada salia de mi boca.

-Creo que lo que has escuchado es cierto,ademas,estas muy bien informada.-añadi amablemente,correspondiendo su saludo.La demonio se llamaba Astratea y como yo,habia elegido un cuerpo espectacular para hacer de las suyas en la tierra.La escuche en lo siguiente que dijo,que llevaba poco y aun no se habia podido divertir.Habia que arreglar eso!

-Eso no puede ser,...-dije negando con la cabeza.Pare y volvi a mirarla.

-Que tiemble este pueblucho de mala muerte,porque voy a convertir esta noche en algo que nos va a encantar,te apetece?.-si,era experta en desatar muertes por mi paso y esa noche me iba a explayar,pues debia ser educada y acogedora con mi nueva amistad.Presentia que ibamos a llevarnos bien,muy bien.

Me alivie al comprobar que todo lo que había oído era cierto, y si la verdad que estaba bien informada puesto que aun mantenía contacto con los seres del infierno, digamos que me pase demasiado tiempo allí y no es que quisiera volver pero si que tampoco me sentía del todo mal allí abajo, y días antes al encuentro con aquel demonio solo tuve que hacer un pequeño ritual para hablar con un demonio que me explico y me dio detalles de como podía encontrarla.
Sonreí al escuchar sus palabras, casi ilusionada al imaginar que podía estar pensando su cerebro- Por supuesto que me apetece, bueno..- Corte mis palabras había oído pasos me gire dándole la espalda durante unos segundos para ver como se acercaban asta la lapida donde yo me había sentado a esperarla dos hombres jóvenes con un ramo de flores en las manos, uno de ellos se agacho sobre la tumba, mire a Odette de reojo con una sonrisa malvada.
Estire la palma de mi mano y con un suave gesto la tierra de la tumba comenzo a moverse, los dos hombres sorprendidos se pusieron en pie y giraron sus cabezas para mirarme asustados- Quiere saludaros muchachos- dije en todo burlón, seguí moviendo la tierra con una de mis manos levantada asta que la tierra se abrió por completo y dejo a la luz un ataúd con otro gesto lo abrí y saque de allí un esqueleto intacto, pero que aun tenia algún resto de cabello, lo eleve por los aires e hice que moviera una mano en forma de saludo- Veis chicos aun se acuerda de vosotros- Reí en voz alta moviendo el esqueleto como a una marioneta mientras los chicos estos se giraban para echar a correr- Odette ¿Vas a dejar que se marchen?- y coloque el esqueleto sentado en la lapida cruzando sus huesudas piernas, exactamente en la misma postura en la cual me había sentado yo, me sacudí las manos y mire a Odette- Le dejamos ventaja? mirales mirales como corren como si pudieran llegar a algún lugar- No pude evitar volver a reír chasquee uno de mis dedos y uno de los dos chicos callo al suelo de boca, acompañado por un grito de desesperacion de su compañero que paro para ayudarle sin apartarnos la vista, le guiñé un ojo y le indique con un dedo que se acercaran a nuestra posición, pero no me hizo caso y me aparto la mirada ayudando a su amigo a ponerse en pie- Mal educados, ¿Que hacemos?- dije mirando con malicia a Odette.

Si!aquella demonio era lo que me hacia falta.Jamas me habia gustado trabajar acompañada,pero tantos meses de soledad en la Tierra,donde tan solo me encontraba con estupidos humanos o algun que otro ser,que en realidad,no valia la pena...

La vi girarse,habia escuchado algo y se habia puesto alerta,pornto averigue las intenciones que tenia para con aquellos pobres humanos que no tenian nada mejor que hacer que ir a un cementerio a poner piedras sobre una lapida para alguien,que dejo de respirar mucho tiempo atras.Lo siguiente fue fantastico,ver sus caras de terror cuando el cuerpo salio de la tumba y ese toque,que me recordaba a mi misma,en el que la demonio movio los huesos para imitar un saludo.

-No,no llegaran muy lejos,pero si por casualidad lo consiguen,nos ocuparemos nosotras.-dije tranquilamente mientras miraba al frente,observando como intentaban huir en vano.Desvie la vista,aquello empezaba a ser demasiado patetico,sobre todo,cuando uno de ellos cayo y otro,en vez de salvar su vida,se quedo para ayudarlo.¿Para eso querian los humanos los sentimientos?Para que "gracias" a ellos se los cargaran...?Bueno,para gustos los colores...

Astratea me miro con esa sonrisa y no pude resistirme.

-Hay que ser hospitalarias,asi que vamos a saludarlos como es debido...-y tras esto,empece a caminar tranquilamente mientras los ojos de ellos casi se les salian de las orbitas.Me acerque al que estaba ayudando y lo lance unos metros atras cogido de la camisa.-Bonitas flores,son para mi?.-le dije mirandolo,mientras apoyaba el pie sobre el otro tipo.Me rei y volvi a lo mio.

-¿Te parece bien quedarte con ese?.-le dije a la demonio.

Me agache para quedar a la altura del tipo e hice que se sentara,cogiendolo de los cuellos de la camisa como habia hecho con el otro.

-Familiares de la muerta?Bah,...no se para que os molestais,no se entera de que venis a verla...-

-¿Que....que quereis?.-dijo el tipo canbiando la mirada de mi a mi acompañante.

-Solo divertirnos...verdad?.-dije mirandola.

Era adorable encontrarse junto a una persona que quizás tuviera menos alma incluso que yo, asentí cuando me dijo de darles la bienvenida y con tranquilidad camine junto a ella sin apartarle la vista a los dos chicos no se escaparían..
Con tranquilidad me cruce de brazos mientras observaba la escena, Oddete se había encargado en menos de dos segundos de los chicos así que no me quedo otra que observar con paciencia esperando que quedara algo para mi. Y desde luego la demonio no se había olvidado de mi, me miro ofreciéndome al tipo que había lanzado anteriormente, y se encontraba de pie con ojos llorosos, mirándome con temor, carraspee al observar al patético humano- No me gustan los hombres que lloran por favor ni se te ocurra- dije con voz cansina - De acuerdo aunque primero debemos enseñarles a ser hombres- Le dije a Odette antes de desaparecer y aparecer justo a la espalda del humano- Tranquilo solo vamos a jugar un poco- dije en susurro a su espalda pasando una mano por su cintura introduciéndosela dentro del pantalón mientras que la otra agarraba con fuerza su cuello.
- Que... Que .. sois- dijo el estúpido humano al que sostenía, a penas sin voz- Que ... Queréis?- Volvió a repetir y entonces algo dentro de mi estallo llenandome de una ira incontrolable, al ver como una puñetera lágrima producida sin duda por el miedo, resbalaba por su mejilla..
- Mierda de humanos estúpidos!!!- grite con ira acto seguido apreté con mis dedos su entrepierna, asta notar como un liquido caliente manchaba mi mano, acompañado por un grito de dolor por parte del humano- Quieres llorar capullo? esto si es motivo para que llores-Apreté un poco mas su entrepierna antes de empujarlo haciéndole caer al suelo.
-Buag!!-dije sacudiéndome las manos- Odette, que puedo hacer con esto? SI ni lo toque y se puso a llorar patético- desvie la mirada hacia el humano que aun gritaba retorciendose de dolor en el suelo sosteniendo su entrepierna.