You think it's over [ Kyra Hudson]

El forense regreso de nuevo para ver el cuerpo y destaparlo, la victima una chica de unos 30 años aproximados, presentaba unas extrañas marcas en sus muñecas. Según el forense no supo quien le había causado aquellas extrañas marcas según su teoría era (que ella misma se provoco aquella marcas) aunque no estaba seguro, de ello. De hecho pensé en muchas teorías, espíritus ¿tal vez? O demonios, hay demonios que suelen marcar a las victimas después de alimentarse de su alma. También había unos brujos que era capaces igual de marcarlas para comerse el cuerpo posteriormente. Pero nada de aquello encojaba en mi teoría general. Estaba seguro que aquello no era una simple muerte por lo que seguí investigando más sobre aquel extraño caso. Al parecer la chica se llamaba McAdams, ni tenía antecedentes criminales ni episodios psicóticos nada (entonces quien les provoco aquellas marcas) hablando con sus vecinos, contaron que al parecer Mc Adams se veía con alguien gracias a la información me dispuse ir a la casa del chico. Para hacerle una serie de preguntas (tal vez así despejar las dudas)

Más tarde llame a la puerta del tipo pero no contesto nadie, a ver aquello pensé entrar cuando vi a una chica en las escaleras de pie. –hey– fantástico ahora es el mejor momento para que alguien me meta en la cárcel o peor ( llame a la policía)

Merediht McAdams, treinta años, trabajo estable, amigos, una buena vida... y de repente se suicida en su casa ¿y antes a destroza y no deja ni una nota o habla con alguien o pide ayuda?
No encajaba, podía reconocer de lejos conductas sociales erráticas y la de Meredith no era, para nada, un comportamiento fuera de lo normal.
Había visto su cadáver en el depósito y había ido hablar con amigos y familiares hasta conseguir el nombre de un tipo con el que se veía desde hacía un tiempo y que no me daba muy buena espina. Me presenté en su casa y me llevé una buena sorpresa. El mismo chico que se me habìa adelantado en el depósito y que había ido a molestar a los conocidos de Meredith antes que yo también estaba allí. A ver qué se inventaba para tratar de despistarme.

-Em... hola ¿buscas a Eric?- el tipo al debíamos investigar, claro.

Observo a la chica que hace un momento recuerdo haberla visto en el deposito de cadáveres, contesto asiento levemente con la cabeza –eh claro es un amigo mío- puedo mentir más estoy seguro de que debe tratase de alguien de FBI. Observo a la chica que luce linda ahora de más cerca me fije que estaba bastante bien para ser del FBI aunque no tiendo a mi suerte, siempre he terminado en rejas espero que esta vez no sea así -¿tu conocías Eric?-escucho lo que habla me quedo mirando su escote espera ( porque siempre hago igual) de nuevo miro a la chica sonrío – si este Eric ya vez es well es un maldito hijo de perra – que puedo decir no tengo ni idea de quien ese Eric, espero saber que esta pasando porque no creo que esas marcas se la halla infligido ella misma tras morir. Me pregunto si Bobby sabría de que se trata, salgo de mis pensamientos me presento a la chica mostrando mi placa del FBI como algo profesional –soy el agente Marley vengo por el caso de Merediht McAdams, siento haberte mentido antes –guardo la placa – veras no puedo estar siempre diciendo ¡ hey soy del FBI! Prefiero…-escucho un ruido miro a la chica -¿lo has escuchado? Estoy seguro que proviene de a dentro –llamo a la puerta, alzando la voz –Eric ¿estas ahí? Tenemos que hablar –

al no recibir una contestación frunzo el ceño, de nuevo escucho otro golpe- saco mi arma derribo la puerta mirando entrando a dentro, observo como un demonio se comía el corazón de Eric, le disparo en la cabeza el demonio sale por la ventana o eso pensé que era un demonio…no estaba ya seguro de creer que ese ser fuera un demonio. Me acerco al cadáver miro a otro lado –maldito hijo de perra –musito por lo bajo, guardo mi arma mirando a la chica que parece estar acostumbrada a ver aquello diariamente. –si tienes estomago de ver lo que queda de Eric –miro en sus muñecas las misma marcas –espera esto lo he visto antes…-me quedo pensando en ¿Qué demonios puede ser esa cosa?

Se me quedó mirando de un modo que no me gustó demasiado, pero hasta no saber quién era no quería mostrarme demasiado susceptible. -Por lo que sé no tenía muchos amigos...- y por lo que había visto, era poco posible que él si fuera uno de ellos. -Digamos que sí, que le conocía...- se podía averiguar mucho de la gente rebuscando: fichas policiales, expediente médico, trabajos, compañeros, vecinos y conocidos y, en verdad, no era muy querido por los alrededores.

Entonces me sorprende sacando una placa ¿Agente Marley? Yo las conseguía por 7'95$ y eran mucho más reales, al menos le curraba más mis nombres falsos. Iba a soltar una de las mías cuando escuche un ruido y me traté de afinar el oído para ver que pasaba dentro de aquella casa. El supuesto policía saco su arma y montó un numerito bastante imponente, tirando la puerta abajo y dando unas cuantas voces, pero no le sirvió de mucho, Eric estaba muerto y ese cabronazo había escapado.

Me acerqué al cadáver y lo miré, tenía las misma marcas que Meredith, pero esta vez habia podido acabar el ritual y había desmembrado a su víctima hasta comerse su corazón. -Picadillo de Eric...- musité, poniéndome de pie y mirando al chico, que seguia pensativo al lado del cuerpo, tratando de recordar dónde había visto aquello. -Bien, saco mi placa falsa o me dices quien eres en realidad- nadie del FBI, con lo cerrados que suelen ser, habría reaccionado como él lo hizo, llevaba la palabra cazador escrita en la frente.

Observo su placa bastante mas falsa que la mía, dirijo una mirada a la chica frunciendo el ceño –pues es una buena pregunta, porque creo que ambos somos lo mismo- para que andar con rodeos todo el rato, acabamos de ver como un chico ha sido comida demoníaca de ese demonio o cosa ser ( que demonios esa cosa) –Entonces o somos los mejores mentirosos, o tenemos algo que decirnos –miro de nuevo el cuerpo de chico algo que pasamos, observo un medallón –seguro que esto es algo más que un simple medallón… teóricamente se usa en tipos de rituales demoniacos pero nunca he visto un demonio como ese- frunzo el ceño observo restos de azufre por lo que mis teorías se despejaron

( es un demonio, de los peores porque creo que es el que te arranca el corazón se lo desayuna) –estoy algo confundido, o ese demonio toma esteroides porque ha dejado al chico que parece un Picasso…-observo a la chica busco respuesta en mi mente que tipo de demonio puede ser ( me pregunto si Sammy sabe resolver este enigma) frunzo el ceño –Well asi que cazadora ¿Qué teorías tienes al respecto? …normalmente he visto como demonios arranca vísceras de todo pero ¿solo el corazón? O es un tipo de demon lobo o –me encojo de hombros –o estamos ante una criatura bastante extraña de definir en su especie.

La placa colaba, siempre, que era lo imporante, y en Houston con traje y a indetificación de Wen no había quien me rechistara... pero ahora estábamos más lejos, así que prefería andarme con pies de plomo, aquella vez había tenido suerte y sólo era un cazador, de haber sido policía en realidad, estaría metida en un buen lío.

Fui hacia la ventana por la que había escapado el demonio mientras escuchaba lo que el chico me decía, sin prestarle mucha atención, la verdad. Había manchas de sangre y restos de azufre por todas partes, pero no debía tocar nada, de hecho, cuanto menos tiempo permaneciera allí, mucho mejor. -En Maryland me crucé con un cabrón que sólo comía hígados humanos... hay de todo- y eso me había extrañado mucho más que ver cómo se comía el corazón de Eric, la verdad.

Volví a acercarme para ver el medallón y saqué una fotografía del bolsillo trasero de mis vaqueros, coincidía perfectamente. ¿Quería escuchar una teoría? Vale, por qué no? -Ellos lo imbocaron... y parecer que se les fue de la mano y han tenido que pagarlo- de poco les había servido el medallón ahora que el demonio se había vuelto en su contra, seguíría atacando a gente para alimentarse de sus corazones y hacerme más fuerte hasta que alguien lo detuviera y más o menos ese era nuestro trabajo ¿no?

-Bueno, ha sido un placer...- dije, con una sonrisa, guardándome la foto y con la intención de quedarme el medallón, pero al chico no le hizo demasiada gracia y me detuvo antes de que siquiera saliera de salón.

Sujeto su brazo cortésmente sacando el medallón de su bolsillo –digamos que prefiero que tu trasero no sea comida de demonios, tienes que confiar en mi- Guardo el medallón no se porque pero aquel gesto de tomar el medallón prestado me recordó un momento a aquella iglesita con manos pegajosas llamada Bela Talbot –parece que este medallón no lo es todo. Te parece si te invito una cerveza seguimos hablando de esto –sonrío esperando una contestación de nuevo…

Mas tarde estamos en el bar que estaba repleto de gente, se podría decir que las meseras con aquellos short ajustado eran la mejor vista. Sonrío de nuevo miro a la chica –aun no me has dicho tu nombre –después de saber su nombre esbozo una sonrisa de medio lado, colocando las manos en la mesa expongo la teoría que tenia en mi cabeza –Well esta claro que tu teoría es buena, pero igual debo decirte algo –saco el diario de mi padre el cual averiguo un especie de demonio lobo que se comía el corazón de la victima chasqueando mis dedos, le muestro el diario con el la teoría de mi padre –son unos hijos de perra muy astutos suelen ser como los Daevas demonios de la noche, también son dados a morder la mano que les alimenta, este tipo de demonio se le llama por medio de un tipo de ritual y –saco el medallón –este es el medio de comunicación para hablar con ese demonio o más bien teléfono demoniaco -

lo que no estaba claro era ¿Por qué estaban llamado a ese demonio? No me extraña de que fuera un tipo de trampa para atraer mi atención atacarme en cuanto me de la vuelta, estaba acostumbrado a todos, hasta de los testigos de Jehová o debo decir mensajeros celestiales angelicales.
–o ese demonio esta fuera de si y el único de modo de cárgaselo es así de simple, arrancándole su corazón después enterradlo rociando agua bendita claro…que debe ser en un lugar sagrado, como una iglesia tal vez.

Estaba visto que no iba a ser tan sencillo irme de rositas y no podía negarme a ir con él mientras tuviera el medallón, lo quería y quería ser yo quien se cargara a ese demonio, así que tuve que aceptar muy a desgana aquella cerveza, estaba visto que no era mi día.

Fuimos a un bar cercano, le seguí en mi coche, ni siquiera sabía quién era y ya tenía que ir detrás, la última vez que le hacía un favor a alguien, vamos... Me pregunta mi nombre y hasta va en plan amable ¿qué pretendía exactamente? -Kyra- dije sin más, viendo como sonreía y me enseñaba una especie de diario que me resultaba terriblemente familiar.
Estaba totalmente inmersa en mis pensamiento, escuchaba sus palabras, su explicación, tenía razón en lo de la imbocación, vale, eso ya lo sabía, pero teniendo ese diario en mis manos tenía que intentar averiguar algo. Lo tomé prestado y retrocedí entre los apuntes sin sentido y las fechas apiñadas en los bordes de las páginas. Había tenido la suerte o desgracia de conocer al dueño de ese diario, pero no en el momento preciso, no para que pudiera evitar que un demonio me arrebatara a mi padre... -Nada, no hay nada- ni un triste apunte, nada que me ayudara a cazarle, que diera más inforación de la que ya tenía y mientras, mi acompañante, allí, alucinado y sin saber qué estaba haciendo.

Kyra por la forma de tomar el diario estoy casi seguro que conocías al dueño ¿verdad?-Parece que mi padre conocía a mucha gente, claro esas ausencias se debían a algo a parte de ver a mi hermano Adam (que nos oculto mucho tiempo) carraspeo algo serio tomo el diario pensando en como salir de este caso, lo guardo en la cazadora mirando a Kyra –Okay esta claro que tu tienes algo que decirme ¿verdad?-

yo no soy el man de poder aguantarme todo, si tiene que decir algo que lo diga porque para eso estamos (para ayudar si hace falta) ya he liderado con demonios de todo tipo y escorias de más pero ¿Qué hay de las personas? Vale soy cazador mi deber como tal es también ayudar a otros cazadores, solo espero que ( Kyra no sea como Gordon ) uff espero que no…

-Kyra no se que estas pensando, pero si quieres que te ayude debes confiar en mi. Porque te soy sincero es mejor confiar en un cazador, que tiene experiencia…en saber cuando una persona miente o esta ocultando algo. Eso es un don que mi padre me enseño a como captarlo todo en seguida, asi que vas a contarme que te paso. Si quieres –levanto las manos-yo no te obligo…pero se que cuando uno esta atrapado necesita ayuda no debe guárdaselo, para que engañarnos yo también soy asi…he sido asi ahora –chasqueo los dedos –ahora bueno he cambiado algo desde que regrese del infierno, me di cuenta de muchos errores…-

Le escuché, distante, mientras bebía de botellín de cerveza mirando al frente. El discurso había sido del todo enternecedor. La familia, la confianza, la importancia de ayudarse unos a otros... no me consideraba una mala persona, pero no era una persona que confiara en otros por el simple hecho de que te lo pidieran, aunque fuera con bonitas palabras.

-Hablas como hablaba él- dije al fin, poco después de que él terminara de soltarme su discurso, - tienes su sonrisa. Miras a la gente, dices un par de verdad y todo el mundo confía en ti ¿verdad?- quizás estaba acostumbrado a que aquello le funcionara, pero conmigo iba a costarle un poquito más. De todos modos, si iba a tener que aguantar mi actitud e iba a tener que trabajar con él en ese caso, lo mínimo era que supiera con quién estaba tratando. -Yo fui una de esas personas a las que tu padre intentó ayudar sin éxito- una caza no siempre iba bien, a veces gente moría, el malo escapaba o quedaban cabos sueltos... yo era, más concretamente, un cabo suelto. -Y lo peor no fue que llegara tarde y que mi padre y mi hermano murieran... lo peor fue que cuando confié en él para que me ayudara a salir de todo aquello, desapareció- y nadie me creyó, mi historia del demonio no era nada convincete y fui de cabeza un hospital, dieciocho meses allí, todo porque John no había abierto la boca ni me había dicho que debía callarme...

A medida que pasó el tiempo y me vi inmersa en la vida de cazadora cada vez comprendía mejor por qué había actuado como lo hizo, él tenía hijos y una familia y una guerra propia, yo también dejaria a cualquiera tirado si viera ante mi la oportunidad de liquidar a quien me había arrebatado a mi familia. -No me malinterpretes, seguro que eres un buen tipo... pero ya confié una vez en un Winchester y la cosa no salió demasiado bien.

Escucho todo lo que dijo Kyra serio, no le culpo por aquellas palabras es más yo era incluso peor no podría perdonarlo. Por lo que estaba atrapado en ese momento no supe que contestarle aunque debo admitir que puede que mi padre se halla equivocado en su vida, y por algunos errores… Carraspeo paso saliva miro a Kyra

–tienes razón, yo se como te sientes también conocí a alguien que se sentía asi. – Aquello me hizo recordar a Jo igual mi padre se equivoco con Bill que pago con su muerte, me pregunto ¿ a cuantos ha fallado mi padre? Porque quizás el buscaba solo sus principios el ser que mato a nuestra madre el hijo de perra de ojos amarillos ¿pero a acaso puedo juzgar a mi padre? No puedo debo al menos decirle lo que siento aunque (cuesta expresarlo)
- escucha yo se que mi padre se puede equivocar con sus elecciones, como humanos todos nos equivocamos en esto de la caza. Nadie sabe lo que puede pasar, puede que mi padre se equivocara en su elección, tal vez no se dio cuenta hasta que fue tarde. Pero se que la gente merece una segunda oportunidad, yo se como te sientes, también lo he sentido con mi padre…-
Miro la cerveza que dejo reposando en mi mano-Mi padre era un gran tipo, lucho todo lo que pudo por nuestra familia y dio su vida por mi algo de lo que me siento arrepentido. Se que a veces pensaba el mismo en su caza obsesión por encontrar al demonio de ojos amarillos, que acabo con la vida de mi madre. Pero…por muchos errores que cometiera, el era mi padre no puedo juzgarlo siempre ahora que esta muerto tampoco puedo. –
Okay es la primera vez que me sincero lo salto todo, porque realmente siempre he sido alguien me cuesta bastante expresarlo todo decir lo que siento pero no aguante. Tomo un trago de la cerveza mirando a Kyra

Le miré confusa. En ningún momento había pretendido que se disculpara en su nombre, de hecho jamás hubiera exigido una disculpa por parte de John, no al menos desde que había comenzado a enteder mejor cómo funcionaban las cosas... Pero lo que peor me sentó en aquel momento fue averiguar que, realmente, John Winchester había muerto. Era una de esas cosas que escuchas en los bares, al menos, una vez por semana y había aprendido a no creer todo lo que oía por ahí, pero que uno de sus propios hijos me lo confirmara era muy distinto.

Me aclaré la garganta tras tomarme un tiempo para pensar que decir, no quería meter la pata, por así decirlo. -Sé lo que es que un padre de la vida por ti- ojo, no decía que entendiera lo que sentía, era una frase que no me gustaba ni decir ni escuchar, -lo siento, de verdad- añadí, con una leve sonrisa, algo forzada.

Hice algo de tiempo bebiendo un trago de mi cerveza y mirando al chico de soslayo, por primera vez en mucho tiempo alguien había logrado incomodarme durante un instante de silencio, así que sentía la necesidad de decir algo, algo que no hiciera que se planteara que su padre podía haber hecho mal conmigo, no era quien de hacerle dudar de esa manera. -Cuando le conocí acababa de enterrar a mi padre y él fue el único que quiso escucharme, fue agradable encontrar a alguien que pudiera explicarme las cosas...- aunque luego yo me fuera de la lengua y no me echara una mano para salir del lío, - me habló de su mujer y de sus dos hijos, eran lo que más le importaban, si no hubiera sido por él jamas hubiera entendido por qué mi padre se sacrificó.- Intenté reproducir en mi cabeza la escena, lo que todavía recordaba de aquello conversación y miré al chico dándome cuenta de que aún no me había dicho su nombre -Por cierto ¿tú eres Sam o Dean?- pregunté, con una sonrisa, sintiéndome algo estúpida.

Escucho en silencio todo lo que dice Kyra , escuchando cosas que me hizo recordar a mi padre lo mucho que lucho, por mi por Sammy para salir adelante. Lo que sufrió tras la muerte de mi madre, pero de todos yo era el que aguantaba todo ese peso sobre mis hombros el tener que liderarlo aguantarlo día tras día, las mentiras de mi hermano sobre Ruby, su problema sobre la adicción a la sangre de demonio y ese poder (que me aterra) como se puede liderar con todo eso, sin volverse loco de atar yo mismo me lo pregunto. Ahora los ángeles buscan el modo de decirle a si a un ángel, que tiene ganas de montarme (eso suena algo guarro) pero si…ese Miguel lo esta deseando, ponerse el traje de gala de fiesta. Al igual que mi hermano que tiene que liderar con lucifer por el mismo problema, ambos estamos en el mismo camino, agua y aceite ( great)

Tome un trago de nuevo de la cerveza asentí a las palabras de ella respondiendo a su pregunta –Dean mi hermano es Sam es el pequeño, nos llevamos cuatro años de diferencia, es todo lo que tengo de familia lo de más ha muerto. Yo…-como puedo decirlo aunque cuesta esto expresarlo-Yo siento lo de tu madre también-carraspeo me bebo la cerveza de golpe –creo que voy a necesitar otra cerveza ¿quieres otra ronda?

Off: padre xD

Se quedó pensativo, tenía la sensación de haberla cagado pero bien, peron o iba a desdecirme, había sido sincera y por primera vez en mucho tiempo había medido mis palabras, siendo cauta y teniendo algo de tacto.

-Me vendrá bien otra, la verdad- dije con una sonrisa, haciéndole una señal al camarero para que nos sirviera otro par de cervezas. No tardó demasiado en servirnos y miré a Dean, haciendo un pequeño gesto de brindis antes de darle un trago.
Había oído muchas cosas sobre los hermanos, sobre sus andanzas, sobre sus problemas... una nunca se cree lo que dicen, algunas historias son bizarras hasta para personas como nosotras, pero podía notar que Dean cargaba un gran peso sobre sus ojos, cuando alguien habla como lo hace él es que tiene mucho camino encima. -Dean, si me permites que te lo diga, la vida nunca te echa encima más de lo que puedes soportar... tienes a Sam ¿no? Habla con él... yo mataría por tener a alguien- pero había dejado atrás a mi madre y mi hermano para no ponerles en peligro, yo misma había elegido aquella vida y ahora todo se venía abajo.

La mesera nos sirve dos cervezas más brindamos, después hablo Kyra sobre mi hermano de que al menos le tengo a el, pero ya no era igual no puedo confiar en Sammy la misma confianza se fue hace mucho tiempo, no hay marcha atrás para eso siempre lucho por el pero ya me he cansado no es por la sangre demonio u otro demonio es que es tarde para volver atrás.-Si –bebo un trago largo de cerveza refrescando mi garganta –yo…-carraspeo un poco al costar decirle algo a Kyra


–a veces la vida de un cazador no es lo que parece, pero a pesar de todas esas adversidades no dejes que te venza Kyra, y no estas sola al menos tienes un amigo –apoyo la mano en el hombro de la chica asiento- voy al baño –me voy al baño me acerco a ver mi reflejo en el espejo me echo agua en la cara escapo un suspiro mirando como el agua se pierde por el redondel –dios ayúdame por favor, necesito me des fuerzas porque yo no puedo – giro por ver si había alguien (menos mal que estaba solo)

Regreso de nuevo sentarme junto a Kyra –Okay ¿Qué vamos hacer con este caso?

Me tensé un poco cuando colocó su mano en mi hombro, era muy exquisita para el contacto físico, ni le conocía, no me hacía ninguna gracia, pero no dije nada, el momento no lo requería. Dean fue al baño, supuse que necesitaba un respiro o quizás la cerveza ya hubiera hecho efecto, me daba un poco igual. Pagué las cervezas mientras él no estaba y esperé, bebiendo mientras escuchaba la música de fondo.
Pronto regresó y parecía algo mejor. -Bueno, yo había pensado que estaría bien resolverlo, pero si se te ocurre algo mejor...- bromeé, sonriendo por la escasa gracia que había tenido. Me quedé pensando un rato, tenía una idea pero no sabía si él estaría de acuerdo. -Tenemos el medallón, podríamos intentar una invocación...- aunque era una idea un tanto peligrosa, tendríamos una oportunidad.

Contesto a la pregunta de Kyra sobre el medallón cuando de pronto varios demonios entra, en el bar lanzando a otro contra el estante de bebidas –is problem- tomo la silla golpeo al demonio contra su espalda –dude creo que te has equivocado –demonio me tome con fuerza me lanzo contra la pared, me levanto mirando al demonio –sabes eres peor que un grano en mi trasero –me levanto comienzo a pelear con el demonio, varios más se acercan observando aquello. Me acerco a Kyra –tenemos que ir es hora de salir corriendo, si no quieres morir –come on - sonrío giro la cabeza observo un Kenworth T600 – tengo una idea –llegamos hasta el Kenworth me siento en el asiento de copiloto, observando a los demonios como se acercan –es una T600 es fácil de manejarlo, mi padre conservaba uno… cuando tenía 18 años me enseño a manejarlo no te preocupes, volteo mi cabeza mirando unas cajas detrás –Parece que intentaba transportar algo- corto los frenos, corto los frenos de aire del tractor, de la caja meto el primer cambio acelero manejo con fuerza atropellando a varios demonios miro –eso por ser unos malditos hijos de perra, tomo una caja –…esos demonios transportan el VP. Demoniaco el virus Croatoan para…distribuir por todo el mundo, no lo creo…

Acelero con fuerza llegamos hasta la carretera varios demonios monta en sus autos nos siguen, miro por el retrovisor –crap – acelero más metiendo marchas giro el volante me coloco en su carril para impedir avanzar golpeo el auto –Observo que Krya se va a la parte de atrás –Buena idea abre la puerta, lancemos esas cajas a ver que les parece…a esos demonios su regalito-acelero más rápido saco un auto del carril que colisiona contra un árbol sonrío, varios demonios se pone en ambos lados del Kenworth ambos golpean –hijos de perra, ahora lánzales las cajas – giro el volante para dar al auto de la derecha – eso por meterte con el man equivocado- me quedo pensando que aquello era ( algo bastante loco, sin sentido pero solo actúo)

off: Soy un man de acción si no me aburro jaja

Primero la pelea en el bar, bastante gratificante, la verdad, luego salimos y robamos un camión lleno de extrañas cajas y, por encima, nos persiguen. No entendía el comportamiento de Dean, parecía mucho más preocupado de lo que la situación requería. Los demonios nos seguían de cerca, los coches nos aislaban por los lados y venías detrás, así que comenzamos a lanzar las cajas sueltas.

-¿Qué coño hay en estas cajas Dean?- pregunté, desde la parte de atrás del T600, sacando mi navaja para quitar los precintos de los palés y poder seguir arrojando cajas a los coches que vienen detrás. Escchaba con cierta dificultad la explicación de Dean sobre un extraño virus demoniaco, eso ya era demasiado para mi. -Espera ¿Croatoan?- comencé a hacer memoria, conocía ese nombre, pero no lograba recordar de qué, hasta que tuve que echar manos de conocimientos muy vagos y muy enterrados en mi cabeza. -Leí sobre eso, sobre un demonio asociado con la peste...- Dean parecía saber de lo que le hablaba, pero no era momento para poner conocimientos en común.

Volví a pasarme a la parte delantera del camión, al asiento del copilotó y saqué mi pistola, la levaba enganchada del cinturón. Dean me miró con pocas esperanzas. -No es para dispararles a ellos...- dije con una sonrisa, bajando la ventanilla. -Acelera, necesito un par de metros de ventaja- Dean aceleró y disparé un par de tiros certeron a las ruedas delanteras de uno de los coches, haciendo que se desestabilizara y se saliera de la carretera, cayendo por la cuneta. Una pistola podía ser útil, después de todo.


off: jajajaja, a la mierda mi idea de llevarme a Dean al ballet xDDD

Sigo manejando a velocidad observo lo que hace Kyra -¿Qué vas hacer? -ella dice que es para disparar a esos demonios -en serio cada vez me sorprendes -sigo manejando pero observo que la carretera esta cortada -Oh… Houston, tenemos un problema - observo por el retrovisor como un demonio acelera nos golpea atrás- hijo de perra- miro a Kyra -Abróchate el cinturón baby porque vamos al mundo de Oz.
Doy marcha atrás dando un giro de 180 grados -ahora a jugar hijos de perra - Manejo rápido atropellando al auto, las cajas salen desprendidas cayendo al parabrisas de los autos

- ja ahora no tienes virus con que distribuir comete esa pendejo-Miro a Kyran sonrío -nena te juro que si salimos de esta te lo pago con lo que quieras…acelero pero se nos complica la cosa Kenworth del mismo modelo se aproxima con velocidad- o damn! Tenemos que hacer algo, pero ahora estoy bloqueado -giro el volante a la izquierda entrando en un camino de tierra paro el Kenworth sacando el arma -Salgamos rápido -observo por el retrovisor como acelera -o come on ahora- Salimos corriendo como podemos, el Kenwoth colisiona con el otro haciendo una gran explosión, caemos al suelo- ¿estas bien?- observo mi pierna intento mover -crap me he partido la pierna

off: ballet ¿en serio? hahaha nah no soy man de ballet pero si la acción baby

Terminamos saltando del camión y echando a correr antes de la colisión, La explosión nos lanzó a varios metro de distancia y caí sobre mi hombro derecho, descolocándomelo, por no hablar de los trozos de metralla que habíamos podido evitar de puro milagro... y los que no.

Me sujeté el brazo con fuerza, dolía a horrores, pero Dean parecía estar peor, se había roto la pierna. -Me he dislocado un hombro- respondí, cuando me preguntó si estaba bien -Siempre me disloco el mismo, empieza a enfadarme- bromeé, al menos ya no me desmayaba y había aprendido a colocármelos correctamente, así que simplemente me levanté, apresando mi mano entre ambas rodillas y empujando con la mano libre el hombro hacia atrás. Se escuchó un crujido y mi cara de dolor lo dijo todo, pero en unos segundos estaba recuperada, tendría que tragarme mi dolor para ayudar a Winchester.

Me arrodillé a su lado y con cuidado examiné la pierna, no tenía muy buena pinta pero era sencillo de solucionar, debía colocar el hueso en su sitio e inmovilizar, podría entablillarle allí mismo si me dejaba. -Puedo colocarte la pierna y luego iríamos a un hospital... si quieres- si se fiaba, pero ya me había visto colocarme el hombro, podía confiar ¿no?

Asentí mirando a Kyran que se había colocado el hombro yo sentí como un dolor más fuerte que otros, se arrodillo para ver como estaba -creo que voy a tener que confiar en ti, antes tendremos que alejarnos -giro la cabeza mirando como los demonios nos buscaban -debe ser rápido -

Si apenas damos tiempo llegamos hasta un lugar apartado, el dolor de mi pierna iba aumentando más. Entramos en un granero hasta cerrar las puertas me apoyo en la paja -dios -aprieto los dientes los ojos me siento doblegado cansado apenas puedo moverme la pierna -Maldita sea porque ahora -

Con dificultad logramos llegar hasta un granero cercano donde poder escondernos, pero los demonios nos buscaban, agudizaban el oído, no podía colocarle la pierna todavía, podrían oírnos y Dean no podría defenderse como era debido y yo no podría estar pendiente de ambos. -Seguro que si no tuvieras la pierna jodida harías alguna gracia sobre tener a una rubia en un granero ¿eh?- sí, o prohibido, una desconocido, la pasión entre la paja... repugnante, pero trataba de hacerle sentir mejor. -Vas a tener que esperarme aquí, creo que puedo ocuparme de todos- estaba a punto de irme cuando Dean me agarró el brazo, otro que no me veía capaz de valerme por mi misma, genial, eso no me pasaba cuando era pelirroja. -¿Qué?¿Vas a decirme que puedes pelear con la pierna así?- no, claro que no, debería fiarse y de verdad.

Le sujeto el brazo -Nada es solo que normalmente yo suelo, salvar a hermosas en apuros ahora es todo lo contrario. Solo falta que se crezcan partes femeninas -aprieto los dientes, intento ver algo que nos ayude observo una lata de alcohol -¿sabes fabricar bombas baby?-le señalo el estante -quizás si fabricamos bombas para esos hijos de perra, tal vez logremos así demonios a la parrilla - más tarde
Construimos las bombas con propano, cables, rocas de sal, clavos de hierro y algunas cosas más que había por ahí.

Ese chico conseguía sacar a la luz mi lado vandálico... me encantaba. -Tranquilo, hombretón, no se lo contaré a tus amigos- aún había muchos tipos que se negaban a aceptar ayuda de una mujer, en esos casos me veía obligada a forzarles a aceptar mi ayuda.
Me sugirió fabricar bombas... vaya, no lo hacía desde el último año de instituto, no sabía si me acordaría de como iba la cosa, pero Dean parecía tener mucha práctica. -Vale, las tengo, quédate aquí, vuelvo enseguida- si no moría en el intento, claro, porque los demonios rodeaban rápidamente el granero.