Trash Talk ( Victoria Grey)

Un gruñido salio de mis labios cuando mordio mi pezon, algo quizas mas animal que yo mismo, intentaba que le pidiera que accelerara? Seria ella quien me suplicaria que lo hiciera, echando ella su cabeza hacia atras, pasee una de mis manos por entre sus pechos mientras me inclinaba hacia delante lamiendo sus senos mientras mis ojos seguian fijos en los suyos, acabe mordiendolos haciendo que un nuevo gemido se escapara de entre los labios de Victoria, sonrei con malicia mientras seguia mordisqueandolos notando como sus manos se clavaban en mi espalda.

Baje mi mano a sus piernas entrelazandolas en mi cintura para levantarme aun con mi miembro en su interior para caminar por la habitacion asta encontrar una pared, donde empotre su espalda en ella.

- Seras tu quien me pedira que siga -me rei-

Estaba dentro de ella sin moverme nada sin hacer nada sintiendo como simplemente aquella idea que asomaba por su cabeza la humedecia. Me movi algo bruscamente, haciendo que sus uñas se clavaran en mi espalda, queria que me lo pidiera, a jugar nadie me ganaba. Pase mi lengua por sus labios bajando por su cuello donde inque un diente, para luego lamer la herida que le habia echo.

- Me lo pediras? Porque puedo estar asi toda la noche

Sabía que mantenerlo "inmóvil" con mi pobre peso, no sería muy eficaz, pero que ni siquiera lo notase me resultó algo frustrante. Gruñe cuando le muerdo en el pecho, y él me devuelve la jugada haciendo lo mismo en el mío. Un escalofrío me recorre contrayendo mis músculos, y en respuesta le clavo las uñas en su espalda.

Me levanta sin salir de mí y da unos pasos hasta empotrarme contra la pared, escapando un gemido de mis labios. Pero si esperaba que empezaría a moverse, estaba muy equivocada. Se para competamente quieto para mi desesperación. No me lo podía creer, otra vez era él. Era imposible jugar y ganar con Jake. Era demasiado fuerte. Y encima sus labios empiezan a bajar hasta mi cuello, mi debilidad, y lo muerde haciéndome una herida. A ver cómo tapaba eso. Clavo mis uñas en su espalda entre excitada y enfadada cuando me pregunta si se lo voy a pedir. Subo mis manos hasta sus hombros, dejándole diez líneas rojas preciosas en su espalda, sanguinolentas.

Pero no tenía la más mínima intención de decirle nada, o al menos aún no. Por eso apoyándome en sus hombros, empiezo a mover yo las caderas, eso no podría impedírmelo, al tiempo que acerco mis labios a su cuello para morderlo con fuerza. No para hacerle una herida, sólo para dejarle una marca morada bastante grande en su cuello.
-Maldito seas Jake.... -le jadeo junto a su cuello, el cual seguía lamiendo.

Resono una de mis carcajadas en toda la sala, mientras Victoria de una manera bastante patosa se movia intentando que yo le siguiera el juego, vamos, ambos sabiamos que era un cabron y cuando no queria perder hacia lo que fuera, pero, esta vez si que me la devolveria de alguna de sus maneras que mas me gustaban. Cada vez que sentia sus dientes clavandose en mi piel un gruñido salia de mis labios. Me movi bruscamente haciendo que ella parara para soltar un gemido que contrajo todo su cuerpo. Me habia movido de una manera que le habia encantado, sabia como moverme cuando queria, brusco, profundo y rapido.

- Lo diras para sentir lo mismo que te he echo sentir? -dije en un leve susurro- Seria una pena que no me empleara tan bien como se hacerlo - puse un tono bastante morboso-

Sabia que habia dado en el blanco cuando entre sollozo y sollozo acabo diciendo que queria mas de mi. Asi lo hice, empeze a moverme en su interior de la misma manera como lo habia echo hacia unos segundos, brusco, profundo y rapido, haciendo que sus manos se clavaran en mi espalda que su cuerpo se echara ligeramente hacia atras y de sus labios salieran gemidos que inundaban toda la habitacion junto a algunos mios que sonaban menos potentes que los suyos.

-¡Hmm!

Dios creo que debía estar muerta y eso era el cielo... o el infierno, me daba igual pero era lo más placentero que había sentido nunca. Y lo mejor, esque era nuevo, la primera vez que lo experimentaba, ese movimiento tan brusco.

Pero de pronto para, pidiéndome una nueva súplica, y lo peor, esque me ví a mí misma, pidiéndoselo. Porque necesitaba sentirlo de nuevo. Y para mi suerte, Jake me complace, repitiéndolo una y otra vez, volviéndome completamente loca.

Subo las manos de su espalda hasta su cuello, y luego hasta su nuca, donde le agarro del pelo con fuerza para obligarle a mirarme unos segundos antes de lanzarme a besarle en la boca, a mordisquearle en el labio. Suspiro, dios cómo me ponía ese hombre.

-Si...sigue...Jake... -jadeo junto a su boca

Cada nueva embestida era un nuevo escalofrío de placer, y sabía que no resistiría mucho antes de llegar al segundo. Mi espalda se golpeaba una y otra vez contra la pared haciendo que aumentara el placer, aunque al dia siguiente supiera que tendría más de una marca.

Acelera su ritmo al tiempo que noto los músculos de su espalda y de su brazo contraerse por el esfuerzo. Le oia jadear y gemir, y hacía que me estremeciera más. Y yo sólo podía repetir una y otra vez su nombre. Una nueva serie de escalofríos recorre mi cuerpo, haciéndo que se convulsionase suavemente. Los músculos de mi sexo reaccionan contrayéndose para después relajarse en uno de los mejores.. no, el mejor orgasmo de mi vida. Dejo escapar un jadeo que casi resultaba un grito, tras el cual me baja al suelo, y sale de mí, para llegar él también al clímax.

Le miro exhausta y jadeante, pero sonriente. Aunque sabía que él no era de ser dulce o mimoso, me abrazo a él susurrándole.

-Sí que has mejorado... ha sido genial -le muerdo el lóbulo de la oreja juguetona