Un rato en el parque (libre)

Realmente habia decidido ir a pasar la tarde al parque es que realmente aunque detestara a los humanos y estuviera ayudando a romper los sellos, tenia que admitir que la unica cosa que me gustaba de los seres humanos era cuando creaban los parques y por raro que me pareciera me sentia feliz de ver familias disfrutando del lugar, pero a la vez me recriminaba por ello ya que yo queria ver a mi hermano lucifer libre, pero tanta alegria me ponia en duda si eso queria realmente, asi que me fui al arbol mas cercano para rescostarme ahi un momento

Aburrida de estar en mi casa, lamentándome por todo lo que estaba pasando, por la distancia puesta entre Jake y yo y por la de problemas que me buscaba con los seres sobrenaturales que había por el pueblo... Me marche de mi casa, con una cazadora de cuero y una coleta alta cogida sin mucho esmero. Camine por las calles del pueblo, saludando a gente conocida y llegando por fin al sitio mas relajante, para mi, del pueblo... El parque. Me acerque a uno de los arboles con mas sombra, y me senté en el banco que estaba próximo a el, debajo de la copa, admirando el gentío y con las manos metidas en la cazadora.

Realmente este lugar me relajaba demasiado, amaba el parque sentía paz y tranquilidad y me cambiaba demasiado tanto así que llegaba a ver a los humanos con algo de pena por todo lo que han tenido que vivir. Abrí levemente mis ojos y comencé a mirar alrededor mío, realmente estaban todos felices, pero mire un poco mas atento y note que había una chica cerca así que decidí acercarme un poco además necesitaba ser algo mas sociable con los humanos.
-Hola un mal día-dije en tono amable

Sentí como alguien a mi lado se movía y pronto se acercaba a mi. Me fije en su pelo desgreñado rubio, con toques morenos. En un figura bien alta y en unos brazos fuertes pero sin llegar a ser muy voluminosos. - Hola, ¿un mal día? El mio es estupendo - Dije respirando hondo para sentir el aire en mis pulmones. Sonreí y vi como un niño jugaba con su madre.

La escuche levemente y desvíe la mirada para ver a una madre jugando con su hijo, realmente eso me molestaba un poco no la situación sino mas bien la nostalgia que pasaba por la mente de mi recipiente y yo lo que mas odiaba era la nostalgia por sobre todas las cosas y solté un suspiro leve.

-Realmente mi día a estado de maravilla, por cierto soy Charlie –-dije extendiendo mi mano

Gire la cara a mi compañero de soledad cuando se presento y sonreí de lado extendiendo mi mano como el había hecho. - Yo soy Shady - Alce los hombros despreocupada, sabia que mi nombre no era muy común pero a mi madre le había gustado siempre desde que había visto una película de jovencita con una heroína con ese nombre. Todavía algunas cicatrices se veían en mi cara después del encuentro con los demonios y mi corazón estaba un poco destrozado pero mi sonrisa no desaparecía de mi rostro. Lo mire de nuevo después de tanto pensar y un silencio nada incomodo. - ¿Que te trae por el parque Charlie?